La banda salmantina, nacida en el seno del club motero Toros Bravos MC, ofreció un repertorio de clásicos "ensuciados" y acelerados, fiel al estilo que les ha consolidado en la escena local
El parque Elio Antonio de Nebrija vibró la noche de este miércoles al ritmo del rock más puro y contundente. La banda salmantina TBMC se subió al escenario con una propuesta clara y directa: rendir un homenaje sincero y potente a los grandes himnos que han marcado la historia del género, un objetivo que cumplieron con creces ante un público entregado.
Fieles a su filosofía, el grupo no se limitó a interpretar versiones convencionales. Tal y como declararon en una entrevista previa a este medio de comunicación, su misión es "ensuciar" y acelerar los clásicos, dotándolos de una nueva energía y una crudeza que conecta directamente con sus raíces.
Esta particular forma de abordar el repertorio se ha convertido en su seña de identidad, permitiéndoles reinterpretar canciones icónicas con un sonido propio, más rápido y potente, que sorprendió y entusiasmó a los asistentes congregados en el parque.
Vídeo: David Sañudo