Mañueco defiende la gestión de los incendios: "Se respondió desde el minuto uno ante un cóctel perverso"

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha comparecido este viernes en el Pleno de las Cortes para dar cuenta de la gestión de los incendios forestales que han asolado la Comunidad este verano. Durante su intervención, ha defendido la actuación del operativo regional, asegurando que se respondió "desde el minuto uno" a una situación que ha calificado de "extraordinaria y de extrema gravedad", provocada por un "cóctel perverso" de condiciones meteorológicas y la acción humana.

Fernández Mañueco ha subrayado que Castilla y León cuenta con un operativo "importante" que se ha "volcado" en la extinción, agradeciendo el "buen hacer y magnífico proceder" de todos los equipos implicados, tal y como recoge Europa Press.

Unas condiciones meteorológicas "excepcionales"

El presidente ha detallado los factores que han complicado las labores de extinción hasta llevarlas "al límite de lo imposible". Según ha explicado, la región ha sufrido una ola de calor "inusitada" y prolongada, con alertas continuas por riesgo de incendios desde el 3 de agosto.

Entre las condiciones adversas, Mañueco ha destacado la temperaturas hasta cinco grados por encima de lo normal, fuertes vientos con rachas de hasta 90 kilómetros por hora, con "comportamientos más explosivos", humedad extremadamente baja, con mínimas cercanas al 5% en algunas zonas y la ausencia de precipitaciones y la presencia de tormentas secas con rayos.

"Nos hemos enfrentado a una situación nunca vista: un cóctel perverso de altas temperaturas, sequedad extrema y fuertes vientos, con tormentas secas capaces de generar auténticos torbellinos de fuego", ha sentenciado.

El factor humano: 72 incendios presuntamente intencionados

Además de la meteorología, Mañueco ha puesto el foco en la "mano del hombre" como causa de muchos de los fuegos. Ha informado de que existen indicios de que "al menos 72 incendios" de los registrados este verano fueron presuntamente intencionados, y ha recalcado que las investigaciones continúan abiertas.

"Espero que caiga todo el peso de la ley sobre los incendiarios", ha afirmado con rotundidad, reconociendo la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en esta materia.

El balance del verano: 141.000 hectáreas y 348 fuegos en agosto

El presidente ha ofrecido las cifras globales de la catástrofe hasta el pasado 26 de agosto. En total, los grandes incendios han afectado a unas 141.000 hectáreas en Castilla y León, con especial virulencia en las provincias de León y Zamora, aunque también con graves consecuencias en Salamanca, Ávila o Palencia.

La superficie afectada se desglosa de la siguiente manera:

• 31% forestal arbolado.
• 11% forestal desarbolado.
• 43% matorral.
• 7% pastizal.
• 8% agrícola.
• 0,5% otros usos.

Solo en los primeros 23 días de agosto, el operativo de la Junta tuvo que hacer frente a un total de 348 incendios en toda la Comunidad.

Defensa de la respuesta: "Se actuó sin regatear ningún esfuerzo"

Fernández Mañueco ha insistido en que se actuó "sin regatear ningún esfuerzo" y que el operativo reforzado en los últimos años había funcionado correctamente hasta que las circunstancias extremas de este verano lo desbordaron. Ha puesto como ejemplo la volatilidad de la situación vivida entre los días 12 y 14 de agosto, cuando se llegaron a contabilizar hasta 14 incendios simultáneos de gran peligrosidad.

Relató cómo, en la mañana del 15 de agosto, la situación parecía mejorar, pero esa misma tarde "los vientos fuertes, las elevadas temperaturas, los rayos latentes y manos incendiarias" provocaron una nueva oleada de fuegos, elevando la cifra a 20 incendios de gravedad, afectando a provincias como Salamanca y Ávila, que hasta entonces no habían sufrido incidencias graves.