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El obispo de Salamanca, ante la ola de incendios: "Es grande el corazón de las gentes de nuestra tierra. Gracias"
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carta a la comunidad diocesana

El obispo de Salamanca, ante la ola de incendios: "Es grande el corazón de las gentes de nuestra tierra. Gracias"

Actualizado 17/08/2025 12:13

José Luis Retana transmite su cercanía a los afectados, ofrece la ayuda de la Diócesis, elogia la "inmensa solidaridad" de los vecinos y agradece el "compromiso heroico" de los equipos de emergencia, llamando también a una "conversión al Señor"

El obispo de Salamanca y Ciudad Rodrigo, José Luis Retana, ha dirigido una carta a los fieles de ambas diócesis para expresar su "dolor y preocupación" por la ola de incendios que afecta a varias localidades de la provincia. En la misiva, el prelado transmite su cercanía a los afectados, ofrece la colaboración de las instituciones diocesanas y elogia la respuesta solidaria de la sociedad salmantina.

Ante una situación que ha obligado a desalojar y confinar pueblos enteros, Retana ha querido compartir la "inquietud, incertidumbre y dolor" de los habitantes, asegurándoles sus oraciones y las de toda la comunidad diocesana.

En su mensaje, el obispo se ha puesto a disposición de todos los damnificados, extendiendo el ofrecimiento a las parroquias afectadas y a las diversas instituciones de la Iglesia en Salamanca y Ciudad Rodrigo. "Me ofrezco, y nos ofrecemos, [...] para ayudaros en todo lo que necesitéis de nosotros y podamos ofreceros", subraya en la carta.

Con un mensaje claro y directo, ha insistido en que los afectados no están solos: "Sabéis que podéis contar con nuestra ayuda y colaboración".

José Luis Retana ha dedicado una parte importante de su carta a alabar la respuesta cívica de los vecinos, destacando especialmente el papel de los más jóvenes. Según el obispo, muchas personas "han sacado lo mejor de sí mismos para colaborar con generosidad en la extinción de los fuegos y ayuda de los más frágiles".

Para el prelado, estos gestos demuestran que "las raíces cristianas están arraigadas en nuestros pueblos" y se manifiestan en "signos inmensos de humanidad y solidaridad ante las tragedias colectivas". Con gratitud, ha concluido: "Es grande el corazón de las gentes de nuestra tierra. Gracias".

El obispo también ha mostrado su gratitud explícita a todos los profesionales y voluntarios que trabajan sin descanso en la primera línea de la emergencia. En su carta, ha enumerado a los distintos cuerpos implicados en la lucha contra el fuego y la asistencia a la población:

  • Cuerpo de bomberos
  • Miembros de protección civil
  • Fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado
  • Autoridades provinciales, municipales y autonómicas
  • Unidad Militar de Emergencias (UME)
  • Cruz Roja
  • Personal sanitario

A todos ellos les ha enviado su "oración y gratitud" por su "compromiso, algunas veces heroico, en este servicio a la ciudadanía".

Finalmente, el obispo ha invitado a una reflexión más profunda a raíz de estos "graves sucesos ecológicos", pidiendo que sirvan para "una conversión al Señor". Citando una homilía de León XIV, ha recordado que la actual crisis ecológica tiene su causa en "la ruptura de las relaciones con Dios, con el prójimo y con la tierra, a causa del pecado".

La carta concluye con una súplica para que cese este "drama" y para que la sociedad aprenda a "cuidar juntos nuestra casa común", enviando su bendición a todos los miembros de las comunidades diocesanas de Salamanca y Ciudad Rodrigo.