ASAJA Salamanca denuncia la "impotencia y rabia" del ganadero afectado, J.A.S.S., y exige a la Junta de Castilla y León medidas urgentes ante la escalada de ataques al ganado vivo que está asfixiando a las explotaciones.
La tranquilidad de una explotación ganadera en La Mata de Ledesma se vio truncada de la forma más cruel. Una vaca y su ternero recién nacido fueron víctimas de un nuevo y brutal ataque de buitres, un suceso que vuelve a encender las alarmas en el sector y a poner de manifiesto la desesperación de los profesionales del campo.
El ganadero afectado, J.A.S.S., relató con crudeza la escena presenciada: "La vaca acababa de tener al ternero y no le dieron ni tiempo a incorporarse. Había alrededor de 150 buitres sobre ellos, devorándolos vivos. Es una escena que te deja impotente y con mucha rabia". Sus palabras, recogidas por ASAJA Salamanca, reflejan el drama que viven muchos ganaderos en la provincia.
ASAJA Salamanca alza la voz contra la pasividad administrativa
Desde la organización profesional agraria ASAJA Salamanca no han tardado en denunciar públicamente este último ataque, insistiendo en que no se trata de un hecho aislado, sino de una "amenaza recurrente" para las explotaciones ganaderas. La organización agraria lamenta la que considera una "pasividad de la administración" ante una situación que califican de "insostenible".
"Llevamos años advirtiendo de esta situación. Los buitres ya no se limitan a carroña, ahora atacan animales vivos y en momentos especialmente vulnerables como los partos", señalan desde ASAJA. Esta problemática, según denuncian, genera "gravísimas pérdidas económicas y emocionales" para los ganaderos, quienes se sienten desamparados.
Ganaderos indefensos ante una especie protegida
La organización recuerda la completa indefensión de los ganaderos frente a estos ataques. Los buitres son aves protegidas, y actualmente no existe un protocolo claro de actuación ni se contemplan compensaciones que ASAJA considere "adecuadas" por los daños sufridos en las explotaciones.
Ante este nuevo episodio, ASAJA Salamanca ha anunciado que volverá a trasladar el caso a la Junta de Castilla y León. Entre sus exigencias se encuentran el reconocimiento de la gravedad de la situación, la adopción de medidas efectivas de control poblacional de estas aves necrófagas y la garantía de una compensación justa para los ganaderos afectados que palie, en la medida de lo posible, las cuantiosas pérdidas.















