Los mayordomos presidieron los actos religiosos que se desarrollaron a lo largo del domingo
Un año más, La Cofradía del Santo Cristo de Hinojosa de Duero ha celebrado hoy, último domingo de abril como manda la tradición, la fiesta del Santo Cristo de la Misericordia. Y un año más los vecinos del municipio arroparon a mayordomos y cofrades en los tradicionales actos religiosos.
La mayordomía este año la han ejercido cuatro miembros de una familia: Josefa Medina Seco y su hijo Diego Alburquerque Medina, María Asunción López González e Irene Medina López. También era miembro de la familia el sacerdote salesiano Eugenio Alburquerque Frutos, que ha presidido los actos religiosos.
La jornada festiva se abrió al mediodía con una misa solemne en la iglesia parroquial, seguida de una procesión por las calles del pueblo. Por la tarde, después del rezo del rosario, la novena y del ofertorio en el templo parroquial, los vecinos acompañaron al Santo Cristo en una larga procesión hasta la ermita situada en el cerro de San Pedro.
A lo largo de la empinada subida hasta el bello templo románico, los cofrades se relevaron por turnos para llevar las andas del Cristo, custodiada por los mayordomos y los sacerdotes del Abadengo, además del salesiano Eugenio Alburquerque.
En la explanada de la ermita, la imagen del Santo Cristo presidió la Bendición de campos, la tradicional rogativa para pedir buenas cosechas.
Ya en el interior del templo, después de los últimos rezos en honor del Santo Cristo, los asistentes entonaron el emotivo canto Ne Recorderis, que puso fin al responso por los difuntos celebrado en el interior de la ermita románica. Muchos devotos se acercaron a la imagen del Cristo para coger un ramito de flores y pasar un pañuelo u otra prensa por los pies del crucificado, objetos que guardarán para conseguir el amparo del Santo Cristo de la Misericordia.
Finalizados los actos religiosos, los mayordomos invitaron a un convite de hermandad a los miembros de la Cofradía, un colectivo de 180 personas que afronta con preocupación, aunque con esperanza, el futuro de la celebración de la Fiesta del Cristo, ya que de momento sólo hay mayordomos comprometidos para el próximo año.
Mañana, lunes 28 de abril, a las 20,30 horas en la ermita se celebrará un funeral por los cofrades fallecidos y a continuación se rezará un Rosario y la Novena.