Diosleguarde, a punto para 2025: "Quiero que se vea un torero nuevo y que ha evolucionado"

Mañana soleada y primaveral en la ganadería de Ángel Sánchez y Sánchez, donde Manuel Diosleguarde vela armas antes de su compromiso en el Carnaval del Toro. El torero charro habla con SALAMANCArtv AL DÍA apenas unos días antes del pistoletazo de salida a su temporada, que arrancará el martes en Ciudad Rodrigo lidiando reses de Talavante y compartiendo cartel con Miguel Ángel Perera, Daniel Luque y el triunfador del Bolsín Taurino.

“Estoy renovado de ilusiones ante esta nueva temporada”, comienza afirmando Diosleguarde, para quien Ciudad Rodrigo es un lugar muy especial: “Yo soy de allí y he vivido allí muchos años, por lo que tengo a toda mi gente esperándome. Además, acartelado con dos figuras del toreo, así que esperemos que sea un buen comienzo”.

La temporada 2024 no fue la deseada por el salmantino, que puso final a la relación con sus apoderados nada más concluir la campaña: “Cuando uno está falto de ilusión o ve que las cosas no salen como uno quiere hay que intentar cambiar cosas. Hay que ser consciente de que la pasada no ha sido una de mis mejores temporadas”.

Sin embargo, lejos de arrugarse, Diosleguarde ha aprovechado el invierno para coger aire fresco y mirar hacia delante: “Me he intentado cargar en el campo gracias a los ganaderos de Salamanca, que siempre me han tratado muy bien y me han dado la oportunidad de torear. Eso me mantiene vivo, me hace sentir y me hace sacar todo lo que llevo dentro cuando llegue la oportunidad de demostrarlo”.

De cara a la presente temporada, el objetivo es “pisar plazas de categoría, aunque sé que está muy difícil”. “Estoy en un momento en el que me encuentro preparado, lo veo claro y creo que es necesario para mi carrera el que me vean en plazas como Madrid, porque al final es la que puede abrirte la puerta de otras plazas”.

Una de las oportunidades que se le niegan incomprensiblemente al salmantino es la confirmación de alternativa en Las Ventas: “Lo que está en mis manos, que es entrenar mañana y tarde todos los días y pensar 24 horas en el toro, lo estoy haciendo”, manifiesta Diosleguarde, quien añade: “No vivo para otra cosa que para el toro, mi entrega es absoluta y eso es lo único que yo puedo hacer. Al final llegará el día que me tengan que dar esa oportunidad, y ahí ya dependerá todo de mí y tendré que aprovecharla”.

El triunfo es necesario para dar motivos a las empresas, el torero no lo niega, pero más allá de eso quiere que se vea una versión renovada de Diosleguarde: “Quiero que se vea a un torero nuevo y que ha aprovechado el invierno para evolucionar y crecer. Todo eso dará que hablar para que se cree un buen ambiente en torno a mi nombre”.

Antes de finalizar la conversación, la pregunta sobre si algún apoderado se ha interesado por Manuel Diosleguarde es obligada: “Sí, es verdad que se ha interesado gente pero de momento seguiré igual. José Ignacio Cascón me acompaña al campo y me va a seguir echando una mano en todo lo que pueda, como lo ha hecho siempre”. La reflexión final del torero es reveladora y esperanzadora: “Seguiremos luchando”.