"¡Puedo hacer cosas que antes no podía!". Llega a Salamanca la tecnología que mejora la vida de pacientes con Parkinson

"Estamos emocionados porque es una gran innovación", explicaba la gerente del CAUSA, Carmen Rodríguez Pajares, este miércoles en el Hospital Universitario de Salamanca con motivo de la presentación de la nueva tecnología Ultrasonidos Focalizados de Alta Intensidad (HIFU), un tratamiento que logra eliminar hasta el 80 porciento de los temblores en los pacientes con Parkinson.

Con este avance "Castilla y León está a la vanguardia sanitaria", añadía para explicar que permitirá el tratamiento de trastornos del movimiento, entre los que se encuentra el Parkinson, con el objetivo de mejorar la vida de nuestros pacientes.

Una técnica cómoda y sin incisiones

Luis López Mesonero, jefe de Neurología Hospital de Salamanca, detallaba que "el proceso se inicia en las consultas de neurología con pacientes con temblor esencial en acciones cotidianas que se ven limitadas, pacientes con Parkinson o con más manifestaciones". En estos casos se aplica la medicación convencional y si no se responde, se emplea esta tecnología HIFU, a través de un equipo multidisciplinar con radiodiagnóstico y Nneurocirugía.

Miguel Ángel Tola, jefe de Neurología Hospital Río Hortega Valladolid, aseguraba que es una "técnica muy cómoda para el paciente, con muy pocos riesgos, ya que se somete a una técnica con sedación, sin anestesia general y con unos riesgos muy bajos".

Por su parte, Javier Pérez Suárez, neurocirujano, añadía que "no hay incisiones pero se provoca una lesión, una quemadura a efectos prácticos, en un punto específico del cerebro. La energía utilizada es mediante un casco con ultrasonidos que se concentran en un punto del tálamo para hacer una lesión de unos 6-7 milímetros". Por lo tanto, es una práctica irreversible porque es una quemadura en el cerebro, aunque "ls riesgos son muy controlados". Su aplicación supone entre 3 y 4 horas de técnica en una resonancia magnética boca arriba.

"Uno de los días más felices de mi vida"

Sonsoles, una abulense que vive en Salamanca, ha sido la primera paciente de CyL en experimentar este tratamiento. "Una experiencia de los días más felices de mi vida. Ahora me siento feliz porque tengo la oportunidad de hacer cosas que ya no podía hacer. Antes no podía beber agua, ni llevar un plato, una bandeja o coger un papel... Tenía sensación de inseguridad, temblaba continuamente. Iba cada vez a más", explicaba.

Y es que, en su opinión, "tenemos los mejores médicos. Ha sido una experiencia increíble. Me he sentido tratada como una reina. Me quito el sombrero ante esta Sanidad".

En la misma línea, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, concluía resaltando que "tenemos unos magníficos profesionales. Valoramos la profesionalidad y la dedicación y el mimo con el que tratan a los pacientes. Queremos potenciar esa atención con las nuevas tecnologías para dar la mejor respuesta y el mejor tratamiento".

Fotos de Vanesa Martins