Estas instalaciones reciben cada año a miles de personas que quieren ver la presa más alta de España y la tercera en capacidad, un recurso que ha quedado limitado al obligar al público a recorrer a pie al menos 4 kilómetros para llegar al centro de su corona
Uno de los principales recursos turísticos del Parque Natural Arribes del Duero, como es la presa de Almendra, ha dejado de serlo. La empresa propietaria de estas instalaciones, construida a mediados de los años 70 para la producción de energía eléctrica en la central de Villarino de los Aires, ha decidido prohibir la parada de vehículos en las dos zonas creadas para este fin.
La empresa, en declaraciones a LAS ARRIBES AL DÍA, alude el cumplimiento de la normativa para este tipo de infraestructuras. Más concretamente, desde Iberdrola han indicado que se trata de adaptar la presa de Almendra “a la normalidad de las infraestructuras hidroeléctricas españolas y europeas donde no está permitido estacionar en la coronación de la presa”. Asimismo, han añadido que “se están reforzando algunos elementos de protección para preservar la seguridad de las personas y de la instalación”.
De este modo, han sido valladas las dos zonas de acceso que hacían de miradores para miles de personas cada año, y se ha procedido a la colocación de señalización vertical y pintado horizontal de la zona de estacionamiento quedando prohibido incluso la parada de vehículos.
Sin embargo, aunque se han colocado bolardos en aquellas zonas de la corona de la presa para evitar la parada de vehículos, esta parte se puede recorrer de manera peatonal, lo que permite ver la majestuosidad de esta mega estructura. Así que las personas que quieran ver desde su centro el paisaje que ofrece este gigante de la ingeniería hidroeléctrica, deberán recorrer a pie unos cuatro kilómetros entre ida y vuelta, es decir, solo apto para senderistas avanzados.
Recurso turístico importante en Arribes
Ante este hecho las quejas y críticas desde la zona no se han hecho esperar, pues consideran que producirá un fuerte impacto negativo sobre el sector turístico en una de las zonas más despobladas y envejecidas de España, pues cada año la presa de Almendra recibe miles de visitas. Es con el Pozo de los Humos en los términos de Masueco y Pereña de la Ribera, y la presa de Aldeadávila, el principal atractivo para miles de personas que se desplazan cada año para conocer el Parque Natural Arribes del Duero.
La presa de Almendra se asienta sobre el cauce del río Tormes y comunica a través de su dique las provincias de Zamora y Salamanca, facilitando así el tráfico rodado entre ambas, en la zona del Parque Natural Arribes del Duero. Con 202 metros de altura de corona, es la presa más alta de España y la tercera en capacidad con algo más de 2.600 Hm3 de agua, solo por debajo de los embalses de La Serena y Alcántara en la Comunidad extremeña. Su recula puede llegar hasta las proximidades de Ledesma, 35 kilómetros aguas arriba.
Este embalse se construyó para alimentar de agua la central hidroeléctrica de Villarino de los Aires a través de un túnel de 15 kilómetros de longitud y 7,5 metros de diámetro excavado sobre granito, también para almacenar el agua excedente del Duero, principal recurso para su llenado, pues hay que señalar que la central hidroeléctrica de Villarino vierte el agua de la presa de Almendra en el cauce del Duero, de donde aspira para subir de nuevo el agua al Tormes en momentos de excedentes y cuando el precio de la energía es más bajo, principalmente durante los fines de semana y en las noches. El agua del Tormes no sería suficiente para su llenado, pues solo la puesta en funcionamiento de los seis generadores de la central de Villarino impediría su llenado. Es más, la presa de Almendra es utilizada para aliviar las fuertes crecidas que se producen cada año en el Duero a través de la central de Villarino. Esto, y la regulación de las presas de Aldeadávila y Saucelle, han evitado inundaciones en Oporto (Portugal) como se producían décadas atrás, por lo que cumple también una función importante en materia de seguridad hidrológica dada su gran capacidad. En sus 50 años de historia solo una vez se han abierto sus compuertas o aliviaderos de superficie, y el motivo fue una prueba para garantizar su buen funcionamiento.
Además de su función para la producción de energía eléctrica, desde mediados de los años 90 la presa de Almendra se convirtió también en el 'depósito' para el abastecimiento de más de 130 municipios de las provincias de Salamanca y Zamora.