La UD Mirobrigense rescata un punto en los últimos compases frente al Jai Alai-Bolívar
David Cepa, que ejerció como jugador de campo ante la falta de efectivos, marcó el gol del empate en la recta final
La Unión Deportiva Mirobrigense firmó tablas (las primeras de la temporada) en su duelo de la tarde sabatina en los Campos de Toñete de Ciudad Rodrigo frente al Jai Alai-Bolívar, que está en la parte alta de la tabla clasificatoria. El empate fue a uno, cayendo el gol de cada equipo al final de cada uno de los períodos de juego.
El que se adelantó en el marcador fue el Jai Alai-Bolívar, en los últimos instantes de la primera parte, en una acción en el área local en la cual, tras desperdiciar el Jai Alai el balón en primera instancia y no poderlo despejar del todo la UD Mirobrigense, llegó a Javier, quién firmó un disparo que dio en el palo derecho y entró.
Previamente, el Jai Alai-Bolívar había visitado de forma periódica el área mirobrigense, repeliendo Héctor un fuerte disparo, y despejando al menos tres balones peligrosos Juanjo, así como otros Marcos y Cepa. Pese a ello, la acción más peligrosa había sido local: una falta botada por Cata desde la banda derecha que fue salvada in extremis sobre la línea por el portero del Jai Alai.
El Jai Alai-Bolívar salió a la 2ª parte a intentar abrir brecha en el marcador, con dos ocasiones medianamente claras al poco de empezar que evitó Héctor, antes de que Cata firmase la primera ocasión local, que se topó con un defensa del Jai Alai cuando iba hacia la portería (o cuanto menos hacia el palo).
El principal problema de la UD Mirobrigense a la hora de luchar por el empate fue lo justo que estaban de efectivos, pese a tener una cara nueva en el equipo, Sergio Lucas, que jugó la mayor parte del encuentro (de hecho ha tenido que volver a los campos Kiko tras retirarse hace un par de partidos).
Curiosamente, en esta deficiencia estuvo la virtud: uno de los porteros del equipo, David Cepa, saltó al césped como jugador de campo, y fue quién anotó el gol de un empate bastante justo en el último suspiro del encuentro.