Los mirobrigenses llegan a su jornada de descanso de la 1ª vuelta tras 5 derrotas consecutivas
El primer equipo del Ciudad Rodrigo realizó en la jornada del domingo su 2º desplazamiento más largo de la temporada, hasta la localidad soriana de Almazán (816 kilómetros entre ida y vuelta desde el Francisco Mateos, sólo 6 menos que el siguiente viaje a Miranda de Ebro), que se saldó al igual que las cuatro salidas previas con una derrota, con la cual los mirobrigenses cierran un octubre totalmente nefasto, ya que han perdido los 5 partidos que han disputado.
La única nota positiva de este duelo de la tarde dominical en Almazán es que el Ciudad Rodrigo se reencontró con el gol, después de que en los 4 partidos anteriores no lograsen ver puerta. De hecho, los mirobrigenses hasta marcaron por partida doble, pero justamente en este duelo ante el Almazán (que sólo había sumado 1 victoria) encajaron el mayor número de goles en contra de lo que va de curso, 4.
El Almazán se adelantó en el marcador en la última jugada de la primera parte, con un remate de cabeza de Cervero en un saque de córner. Casi al volver de vestuarios, en el 48’, los sorianos lograron el 2º, con la firma del mismo jugador. Viendo la cuenta goleadora del Ciudad Rodrigo este curso, la tarde parecía muy cuesta arriba, pero cuatro minutos después Miguel recortó diferencias, dando un balón de oxígeno.
Sin embargo, ese balón duró poco más de 10 minutos, ya que en el 64’ el Almazán puso el 3-1 con una jugada individual de Hugo. El Ciudad Rodrigo logró reaccionar, y sólo 4 minutos después cayó el 3-2, con la firma de Alberto García. Quedaban muchos minutos por delante, pero ya solo hubo un gol más, con la firma local de Cervero, en el 75’.
Tras este duelo, el Ciudad Rodrigo alcanza su jornada de descanso de la 1ª vuelta. Cuando regresen, el fin de semana del 9 y 10 de noviembre, recibirán en el Francisco Mateos al Atlético Mansillés, el equipo ante el cual ‘cambió la historia’ al final de la temporada pasada en Regional con ese gol ‘imposible’ de Farrés en el 100’. Parafraseando la canción, ojalá que ese día 'vuelvan los buenos tiempos'.