Los animales, en continua reproducción, campan a sus anchas por el campo de fútbol y su entorno, provocando el malestar de jóvenes deportistas.
Desde hace tiempo, el entorno del campo de fútbol Vicente del Bosque se encuentra plagado de gatos que campan a sus anchas, causando graves problemas en el césped del complejo deportivo, además de generar situaciones poco higiénicas para los cientos de niños y niñas que a diario practican su deporte favorito. Los arbustos que dividen el Centro Comercial Los Cipreses del campo de fútbol son un entorno propicio para la cría de los felinos. Desde ahí, los gatos atraviesan los barrotes que delimitan el recinto deportivo, haciendo del tapete verde su lugar de esparcimiento y recreo, defecando sobre el mismo y jugando con el césped y las redes de las porterías. Todo ello supone un grave trastorno para los equipos de fútbol del CD Navega y del CD Salamanca Fútbol Femenino, que comparten estas instalaciones municipales.
Aunque el problema afecta a ambos clubes por igual, es Ángel Luis García "Gelu", coordinador del CD Navega, quien toma la palabra para explicar la situación a la que se enfrentan un día tras otro: "El principal problema lo tenemos con los excrementos de los gatos. Ellos hacen sus necesidades dentro del campo, sobre todo en la banda de los banquillos y en uno de los fondos, donde tienen todo desastroso. La verdad que teniendo niños pequeños jugando es un auténtico problema porque encontramos el campo plagado de heces de gato, además de que escarban en el césped, dañándolo, al igual que con las redes, que las deterioran enseguida".
Estas tareas de limpieza y mantenimiento corren a cargo de los equipos, tal y como explica Gelu: "Normalmente, cuando empiezan los partidos por la mañana hay que limpiar todo. Intentamos quitar todo lo que vemos y podemos, pero en ocasiones los futbolistas pisan en los excrementos, por lo que el mayor problema es de higiene porque a veces no te das cuenta y pisas. Además, como he comentado anteriormente, el césped no está en las mejores condiciones para jugar al fútbol". El directivo del club salmantino añade que el año pasado tuvo que interrumpirse un partido de la categoría Juvenil Regional a causa de este problema, quedando además reflejado por el árbitro en el acta del encuentro.
Son muchísimas las familias que de lunes a domingo llevan a sus hijos a practicar este deporte en estas instalaciones municipales y, por tanto, son conscientes de la situación. "De momento, aunque se ha comentado la situación con los padres, no se han quejado", señala Gelu, quien añade: "Es algo que no depende directamente de nosotros y sinceramente vemos una difícil solución. Llevamos desde hace tiempo (unos dos o tres años) con el problema y todavía no está solucionado. De hecho, creemos que hay mucha gente del barrio que les está dando de comer y de beber porque cada vez son más los gatos en la zona, ya que están criando".
Es en este punto de la conversación cuando interviene Lorenzo Hernández, presidente de la Asociación de Vecinos Navega: "Efectivamente, sabemos que hay gente mayor que le lleva comida y aunque los agentes de la Policía Local y yo personalmente le hemos llamado la atención y dicho que no lo hagan, siguen con su rutina de alimentarlos". Abordando las posibles soluciones, manifiesta lo siguiente: "La solución pasa por la limpieza de esos arbustos, pero no sabemos si el Ayuntamiento de Salamanca ha trasladado nuestras quejas a la propiedad del Centro Comercial Los Cipreses, ya que esa vegetación no pertenece al consistorio, sino a ellos. Eso evitaría la reproducción de los gatos, aunque también quiero señalar que hay buena intención por parte de la protectora de animales municipal, que enseguida viene cuando trasladamos nuestras quejas, por lo que la disposición del ayuntamiento es total para solucionar el problema".
Vuelve a tomar la palabra Gelu para incidir en dar solución a la problemática, aunque señala que no son los indicados para darle solución: "Creo que debe ser el Ayuntamiento el que tome cartas en el asunto, al igual que el Centro Comercial de Los Cipreses, ya que los gatos están instalados en la zona de los arbustos que lo separan del campo de fútbol. Hoy en día, con la normativa que hace referencia al tema animal hay que tener mucho cuidado porque no se puede hacer nada que dañe su bienestar. Se ha planteado tapar un poco la zona de acceso al campo poniendo una malla pero los gatos entran por otro lado. Por tanto, eso no es una solución, es un parche. Pero lo que está claro es que los expertos deben intervenir para erradicar el problema que afecta a tantos niños y niñas que solo quieren jugar al fútbol en las mejores condiciones posibles".