Representación patrocinada por la Diputación de Salamanca con motivo del quinto centenario del fallecimiento del humanista autor de la primera Gramática española
La iglesia parroquial de San Juan Bautista acogió en Valverdón la obra de Denis Rafter Buscando a Nebrija interpretada por el grupo de teatro 'Lazarillo de Tormes' con el patrocinio del Área de Cultura de la Diputación de Salamanca a petición del Ayuntamiento de la localidad.
En su término municipal, este pueblo atesora un paraje que guarda grandes pasajes de la historia de España: la casa de los dominicos en Zorita, que albergó en la época de nuestro protagonista, Nebrija, a algunos de los personajes con los que, para bien, como en el caso de Cristóbal Colón y, para peor, como sería la relación con Diego de Deza -prior de los dominicos, confesor de la reina Isabel la Católica, inquisidor general…-.
Deza y Nebrija tuvieron vidas paralelas ya que el primero, el toresano, nació un año antes que el Lebrijano y fallecería un año después. Los dos compartieron largas temporadas en Salamanca y por tanto en su Universidad.
Diego de Deza en 1504 ordenó confiscar los escritos de Antonio de Nebrija por las declaraciones de éste en favor de la intervención de los filólogos en la revisión de los textos de las Sagradas Escrituras.
Son muchos los momentos en los que las espectadoras y espectadores vivieron con sorpresa e intensa emoción, acentuada aún más con la música del que fuera el mejor alumno de Nebrija, Juan del Encina, que al son de diferentes instrumentos y magníficas voces envuelven y embellecen esta obra que desgrana en diálogos la figura de este genio universal y hombre que aspiró siempre a lo más grande.
La ovación que cerró la representación fue, sin duda, el mejor resumen de lo que experimentó el público valverdonés y, en general, el de todos aquellos pueblos que tienen el placer de disfrutar de esta sencilla pero espléndida obra de teatro y son ya 232.