Un poco de orden

Siguiendo con vehículos de transporte colectivo, la Gran Vía es un lugar interesante para ver un choque de intereses entre actividades diferentes, y la sensibilidad municipal por la calidad de sus propios servicios públicos. Me refiero al uso de paradas de transporte publico municipal por autocares turísticos, después de gastar unos 650.000 euros del erario público dotando a la ciudad de un lugar adecuado y específico donde dejar o recoger ellos a sus viajeros. El Centro de Recepción y Encuentro de Visitantes en la Plaza del Mercado Viejo.

Tras la decisión sobre un servicio turístico tan útil, en la actividad económica trascendental de la ciudad, se espera un trabajo previo de análisis y estudio. Aparte del pasado Plan Estratégico, y el actual Plan de Sostenibilidad Turística. Incluyendo planificación de rutas de visita por nuestro casco histórico Patrimonio de la Humanidad, sus puntos de partida y teniendo en cuenta las diversas circunstancias de los visitantes. Según respuesta en la Comisión de Fomento del 17 de mayo de 2022 de su Presidente, “la regla general es que se utilice la citada Plaza que con las cuatro dársenas se encuentra preparada” y añade “según le consta es cierto que en situaciones puntuales (personas mayores, personas con movilidad reducida, etc.) se ha autorizado la parada en otras ubicaciones”. Para lo primero convendría mejorar la inexistente señalización desde las entradas a la ciudad.

La última frase del acta parece cuestionar esos posibles trabajos previos. Claro que en principio pensaron hacer casi una Estación de Autobuses en la Vaguada de la Palma, ante la barbaridad del destrozo la alejaron hasta debajo de la Facultad de Educación. En ambos casos innegablemente los turistas no quedaban a la intemperie en sus cortas esperas. Con lo realizado en la Plaza del Mercado Viejo, cuando llueve se mojan o pueden perecer de insolación, sin solución hasta el momento. Sorprende no consideraran la cuesta de Tentenecio y haya de darse tanta excepción puntual, también podría ser el camino de vuelta y no el de inicio. Aunque con la Fonda de Veracruz como Centro de Recepción de Turistas esto se complica, si la acaban alguna vez.

Aparte de 4/5 autobuses diarios de cruceristas en Portal de Camiñas, según el Ayuntamiento, no es raro encontrar otros autocares turísticos deteniéndose donde les parece bien. En especial en paradas de transporte público de la Gran Vía, sin autorización alguna. Introduciendo trafico innecesario y evitable de grandes vehículos junto a la zona Patrimonio de la Humanidad. Ya sorprende no sea de conocimiento municipal, quizás alguna de las profusas cámaras colocadas por su entorno se podían dedicar a prevenir esto. Indudablemente el mal uso, no solo por parte de estos vehículos claro, de las paradas del autobús urbano repercute en el servicio a sus usuarios. Entre los que también hay “personas mayores, personas con movilidad reducida, etc.”

En sus tiempos policías municipales rondaban en torno a la Plaza Mayor, ocupándose también de problemas de tráfico. No sé si algo así es la solución, pero sería deseable poner orden. Se puede empezar por señalizar de forma eficaz la existencia del Centro de Recepción y Encuentro de Visitantes en la Plaza del Mercado Viejo desde los accesos a Salamanca. Y, además de mejorarlo, obligar a su uso, quizás mediante alguna norma legal municipal. También sería deseable diseñar rutas para los grupos de día conformes a los intereses salmantinos, como se hace en otros sitios precisamente utilizando restricciones de circulación y aparcamiento. Las mejores Bajas Emisiones son las que no se emiten. Confiemos alguna vez decidan afrontarlo por fin.