En esta ocasión sólo se prohíbe la realización de barbacoas en el monte, pero no en otros espacios abiertos
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León ha decretado la primera alerta de riesgo de incendios forestales por causas meteorológicas de este verano 2024 para los días 18, 19 y 20 de julio, ante la ola de calor que se espera para estas jornadas, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología.
En concreto, para estos días se prevé un “incremento notable” de las temperaturas máximas y mínimas, lo que generará un “empeoramiento progresivo de las condiciones de humedad del combustible vegetal”, así como rachas de viento superiores a los 40 kilómetros por hora. Esta declaración de alerta por parte de la Consejería implica la entrada en vigor de una serie de medidas para evitar incendios forestales.
Respecto a años anteriores, hay un cambio notable: cuando se declaraba una alerta de este tipo quedaba totalmente prohibida la realización de barbacoas en espacios abiertos, pero en esta ocasión, según la información difundida, sólo se prohíben en espacios abiertos del monte o en la franja de 400 metros del terreno que lo circunde.
Lo que se mantiene como otros años es la prohibición de encender fuego en el monte en todo tipo de espacios abiertos, en zonas recreativas y de acampada (incluso en zonas habilitadas para ello) y la suspensión de cualquier autorización concedida para el uso de fuego, fuegos artificiales, cohetes o artefactos de cualquier clase que contengan fuego.
Asimismo, estos días estará prohibido el uso de maquinaria cuyo funcionamiento habitual despida chispas o descargas eléctricas, como sopletes, soldadores y radiales, tanto en el monte como en una franja de 400 metros del terreno que lo circunde.
Además, no se podrán utilizar cosechadoras o empacadoras cuando, de forma simultánea, la temperatura sea superior a 30ºC y la velocidad del viento supere los 30 kilómetros por hora, aunque se recomienda “posponer las labores no urgentes". En caso de que sí se lleven a cabo estas labores, "es necesario tener a mano los medios de extinción y el personal suficiente para controlar los posibles incendios que se puedan originar como consecuencia de la labor".