Los encargados de dar el primer Campanazo (que fue doble) fueron los que promovieron la recuperación del encierro a caballo hace 40 años
A las 18.12 horas de la tarde del Viernes, Ciudad Rodrigo estalló en fiestas con el primer Campanazo del Carnaval del Toro 2024, que fue dado (por partida doble) por varias de las personas que promovieron la recuperación del encierro a caballo hace 40 años, que han sido objeto de un homenaje por parte de la Asociación Cultural Carnavaldeltoro.es con la entrega de su ‘Reloj Suelto’. En concreto, en la tarde del viernes fueron protagonistas José Sevillano, Andrés Sevillano, Manuel Montero, Juan Luis Montero, José Ramón Cid, José Blanco y Juan Antonio Alanero, pertenecientes a las familias de los Panza, Perita y Pichoga.
Ese Campanazo ‘doble’ se dio ante una Plaza Mayor totalmente abarrotada, sin notarse lo más mínimo la complicada meteorología que estaba viviendo Ciudad Rodrigo desde primera hora de la mañana del Viernes. En lo que respecta a los aproximadamente 20 minutos que duró el acto del Campanazo en sí en el ágora, no llovió como tal (sí cayeron unas gotas en un momento dado, abriéndose algunos paraguas), pero sí lo había hecho previamente, de forma intermitente.
Por ejemplo, llovió con fuerza de 16.35 a 16.45 horas (aproximadamente), pillándole de lleno a la notable cantidad de personas de todas las edades que estaba esperando en el Registro el inicio del reparto de los pañuelos farinatos por parte de la Asociación Cultural Carnavaldeltoro.es. Aunque se había dicho que debido a las condiciones meteorológicas se iban a repartir en la bóveda de la Puerta del Conde (para que los voluntarios no corriesen riesgo de mojarse), como dejó de llover, se decidió repartirlos como es habitual en el Registro.
La Asociación Cultural Carnavaldeltoro.es había preparado un total de 8.100 pañuelos, pero un año más volaron, e incluso con más rapidez de lo habitual. En este sentido, fue llamativo que muchos mirobrigenses, en vez de esperar a subir a última hora para así mojarse durante menos rato (dado el caso de que lloviese), lo hicieron incluso más temprano. También anticiparon su subida, para evitar la lluvia, las charangas, que inicialmente se situaron en la balconada de la Casa Consistorial para no mojarse, pero acabaron por bajar al coso (a la parte delantera del mismo).
A lo largo de esa subida de miles de personas hasta la Plaza Mayor fue chispeando de forma intermitente, pero las ganas de fiesta que tenían los mirobrigenses (y ya muchos forasteros) eran muy superiores a esa ‘molestia’, con lo cual el Carnaval del Toro 2024 empezó a lo grande un año más, simbolizado por ejemplo con el lanzamiento de múltiples globos y confeti, tanto desde el propio ágora como desde la balconada de la Casa Consistorial.