El ministro asegura que el Gobierno acompañará al sector agrario para la transición hacia un modelo de producción más sostenible y rentable.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha reiterado hoy el compromiso evidente, con hechos, de este Gobierno con agricultores y ganaderos. “El Gobierno y este ministro están dispuestos a seguir trabajando, con las organizaciones agrarias y el conjunto del sector, para avanzar hacia el futuro”, ha recalcado el ministro, quien ha añadido que “agricultores y ganaderos quieren algo sencillo; que se les escuche, comprenda y respete, y esa es la actitud en la que está este Gobierno para la búsqueda de soluciones”.
Ha señalado, en referencia a las protestas agrarias en Europa, que la situación con España es diferente y ha mencionado, por ejemplo, que el Gobierno va a mantener la devolución del impuesto especial de hidrocarburos al gasóleo agrícola -punto de fricción en otros países- y ha destacado que la reforma de la ley de la cadena
alimentaria, que emprendió este Gobierno, recogió una de las demandas históricas del sector agrario: prohibir la venta a pérdidas.
El ministro ha remarcado que “agricultores y ganaderos nos van a tener siempre al lado” en sus reivindicaciones justas, como es la rentabilidad y el respaldo en una transición justa a un modelo sostenible de producción. El ministro ha reiterado el apoyo del ministerio que se ha visibilizado en un paquete de ayudas por más de 4.000 millones de euros en medidas fiscales, laborales y de las que 1.380 millones de euros son ayudas directas extraordinarias para apoyar a agricultores y ganaderos ante las situaciones de incremento de costes y por la
sequía, la mayor cuantía de ayudas extraordinarias directas que se ha destinado al sector, porque lo necesita y este Gobierno es consciente y lo apoya.es la actitud en la que está este Gobierno para la búsqueda de soluciones”.
Planas ha avanzado que el Gobierno va a trabajar junto a las comunidades para identificar qué elementos es posible reducir en la carga administrativa para los productores.
Planas ha subrayado la importancia que tienen los acuerdos comerciales con terceros países para el sector agrario español. De hecho, en el año 2000 la balanza comercial agroalimentaria era negativa y hoy arroja un saldo positivo de casi 14.900 millones de euros, con unas exportaciones que superan los 70.000 millones.
Respecto a la aplicación de la Política Agraria Común (PAC), el ministro ha explicado que mecanismos como los ecorregímenes han tenido buena aceptación en el sector, ya que 3 de cada 4 agricultores y ganaderos se han acogido a alguno de ellos.
Para incentivar el relevo generacional, la nueva PAC incluye más presupuesto para favorecer la incorporación de jóvenes, con unos 220 millones de euros al año, tanto a través de ayudas directas como de desarrollo rural. El ministro ha avanzado que esta cuestión se recogerá en la futura ley de agricultura familiar, respetando siempre las competencias de las comunidades autónomas y con un diálogo permanente.
Entre 2022 y hasta hoy el Gobierno ha destinado unos 1.400 millones de euros en ayudas directas extraordinarias para los agricultores y ganaderos de toda España, sobre todo, los más vulnerables al incremento de precios y de las consecuencias de la sequía. Los sectores más beneficiados son los ganaderos, tanto de leche como de carne (unos 700 millones de euros) y se habilitaron casi 300 millones de euros para paliar los efectos del incremento del coste de los fertilizantes.
Los agricultores de cultivos herbáceos de secano y de determinados cultivos industriales (tomate de industria y arroz) contarán con casi 270 millones de euros para apoyarles por la sequía. Otros 81 millones de euros procedentes de la reserva agrícola de la UE han ido a productores de frutales de pepita, de hueso, tropicales, cítricos y frutos de cáscara; 38,7 millones al sector citrícola; 8 millones de euros a los productores de la cereza del Valle del Jerte (Cáceres) y 5 millones de euros para el sector apícola.