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Luis García Jambrina: "Unamuno estaba siempre investigando, no se conformaba nunca con la verdad oficial de los hechos"
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Literatura

Luis García Jambrina: "Unamuno estaba siempre investigando, no se conformaba nunca con la verdad oficial de los hechos"

Actualizado 24/01/2024 15:47
Berta Joven

El escritor y profesor de la Universidad de Salamanca acaba de publicar la novela El primer caso de Unamuno, que presentará el 25 de enero en la Librería Santos Ochoa (Gran Vía).

El escritor y profesor de la Facultad de Filología de la Universidad de Salamanca, Luis García Jambrina, inaugura una nueva saga con el rector más célebre de la USAL. El primer caso de Unamuno acaba de ver la luz y su autor presentará el título junto a Paqui Noguerol el 25 de enero a las 19:30 horas en la Librería Santos Ochoa (Gran Vía).

¿Cómo se plantea convertir a Unamuno en detective?

Llevaba tiempo con ganas de hacer algo sobre Unamuno como protagonista, sobre todo después de hacer con Manuel Menchón el libro La doble muerte de Unamuno. Había pensado hacer algo sobre Unamuno en París como víctima de un complot de asesinato pero al final le di la vuelta y lo acabé convirtiendo en una especie de detective. El personaje da mucho juego.

¿Por qué se implicó Unamuno en la migración de los vecinos de Boada a Argentina?

Unamuno era muy sensible a todo lo que tenía que ver con la cuestión agraria, la situación en los pueblos, etc. Siempre que se enteraba de alguna situación en la que las víctimas eran campesinos, solía escribir sobre ello. Cuando se enteró de esta noticia, al día siguiente se fue a Boada en tren para saber de primera mano qué era lo que estaba pasando en este pueblo, por qué la gente quería emigrar a Argentina. Le preocupaba mucho la despoblación; hay que tener en cuenta que a finales del siglo XIX y los primeros años del XX muchos pueblos de Salamanca se quedaron vacíos porque tuvieron que emigrar o porque los echaron los terratenientes que se habían adueñado a las tierras del pueblo. Lo más interesante es que Unamuno era rector en aquella época y no era habitual que un catedrático bajara a pie de calle y se interesara por la gente más desfavorecida de aquella época.

Unamuno es uno de los autores del siglo XX más estudiado. Incluso se han rodado varias películas sobre él. ¿Qué nuevas facetas nos aporta este Unamuno detective que no conocíamos?

He situado mi novela en un periodo anterior al que suele aparecer en estas películas. Lla idea de partida -como se ve ya en el título- es hacer una saga sobre el personaje e ir haciendo un recorrido por parte de su vida. Esas primeras décadas en el siglo XX son fundamentales. Unamuno es un autor muy conocido pero yo creo que hay todavía mucho que explorar. Es una persona que tiene muchas facetas. Tuvo una vida muy activa, no era el intelectual encerrado en su casa, sino que estaba continuamente fuera e interesándose e implicándose en muchas cosas. Ese es el Unamuno que yo he querido mostrar.

Así que estamos al principio de una futura saga

El proyecto inicial es hacer una serie de novelas protagonizadas por Unamuno en diferentes periodos de su vida, centrando cada novela en un caso policíaco, procurando siempre que este caso tenga una base real. Trato de que el lector crea que eso pudo haber ocurrido. Unamuno estaba siempre investigando, no se conformaba nunca con la verdad oficial de los hechos.

¿Qué personajes secundarios existieron de verdad?

La mayoría son de ficción excepto la familia de Unamuno, su mujer Concha y los hijos que tenían entonces, que eran siete. Hay un ayudante de Unamuno que es abogado y también un personaje femenino importante: una anarquista catalana de enterarse de lo que está sucediendo en el pueblo de Boada viene a Salamanca. Esto me ha permitido también meter una trama de carácter amoroso. Esta curiosa relación también está inspirada un poco en el libro menos leído de Unamuno, Teresa, que se publica precisamente en el año 24.

¿Cómo era la Salamanca de principios de siglo?

Según describen algunos viajeros, era muy contradictoria. Por un lado, era una ciudad muy hermosa llena de edificios y de monumentos de gran belleza y por otro, se caracterizaba por la falta de higiene y el mal estado de las calles. Alguien en un artículo define Salamanca como “una gran señora de la nobleza a la que le huelen los pies”. Es una ciudad en la que la iglesia tiene mucho poder. En la provincia, los grandes terratenientes compran grandes extensiones de tierra que las convierten en dehesas para el ganado. Las grandes ganaderías empiezan a surgir justo en ese momento. La Universidad estaba en un momento de cierta decadencia, pues durante el siglo XIX estuvo a punto de desaparecer y perdió muchos alumnos. En la época de Unamuno empieza su recuperación.