Desde el inicio de los tiempos, uno de los aspectos que mayores problemas ha causado al hombre es la incomunicación. La incapacidad para comunicarse puede conllevar ausencia de respeto por el otro, violencia o guerra. Y sobre todo representa el pecado de la soberbia.
Cuenta la leyenda que inicialmente en la tierra se hablaba un único idioma y que todas las personas se entendían. Los hombres emigraron desde Oriente y llegaron a la llanura de Senaar para establecerse.
Decidieron construir una torre para llegar hasta el cielo. Esto le pareció una arrogancia a Dios, que decidió crear distintas lenguas para que no se entendieran, no pudieran construir la torre y se vieran obligados a encontrar un lenguaje común para lograr el entendimiento.
Nota histórica:
La torre de Babel aparece en la tradición cristiana, pero también en la antigua Grecia y en algunas tribus de África oriental. Algunos estudiosos opinan que la torre de Babel pudo ser una construcción real de la antigua Babilonia.
La soberbia se caracteriza por tener un sentido exagerado de nuestras capacidades o de lo importante que nos sentimos. De hecho, creen que no tienen nada que aprender de los demás, siempre necesitan llevar razón y piensan que los demás son inferiores. Por lo cual, en raras ocasiones escuchan otras opiniones que no sea la propia.
Hoy nos encontramos que el Congreso es La Nueva Torre de Babel, nadie entiende a nadie. Semejan a burros y tigres (fábula de Esopo)
EL BURRO Y EL TIGRE
El burro le dijo al tigre:
—El pasto es azul.
El tigre respondió:
— No, el pasto es verde.
La discusión se calentó, y los dos decidieron someterlo a un arbitraje, y para ello concurrieron ante el Rey de la Selva.
Ya antes de llegar al claro del bosque, donde el león estaba sentado en su trono, el burro empezó a gritar:
— Su Alteza Real, Su Alteza Real, ¿es cierto que el pasto es azul?
El león respondió:
—Cierto, el pasto es azul.
El burro se apresuró y continuó:
—El tigre no está de acuerdo conmigo y me contradice y molesta, por favor, castíguelo.
El rey entonces sentenció::
— Tigre serás castigado con 5 años de silencio.
El burro saltó alegremente y siguió su camino, contento y repitiendo:
— El pasto es azul, el pasto es azul...
El tigre aceptó el castigo, pero antes le preguntó al león:
— Su Dignísima Majestad, ¿por qué me ha castigado el pasto es verde?
El león respondió:
— De hecho, el pasto es verde.
El tigre preguntó:
— Entonces, ¿por qué me va a mortificar con la cárcel?
El león respondió:
—Eso no tiene nada que ver con la pregunta de si el pasto es azul o verde. El castigo se debe a que no es posible que una criatura inteligente como tú pierda tiempo discutiendo con un burro.
Moraleja: discutir con personas necias que no quieren ver la verdad es una pérdida de tiempo. No gaste un segundo de su vida en discusiones sin sentido. Hay personas que según venga el viento… giran cuál veleta. En este caso, el viento intenta buscar ese puñado de "nueces o votos" necesarios para seguir mamoneando otra legislatura. ¡Pobre España!
La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.
Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.
La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.
En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.