Éxito de la ruta teatralizada por la villa patrimonio de San Felices de los Gallegos
El objetivo del Ayuntamiento es dar a conocer la historia y los monumentos de uno de los más importantes conjuntos históricos de la provincia
Un paseo por las calles de la villa medieval de San Felices de los Gallegos en una noche de verano; un recorrido guiado por el patrimonio monumental del Conjunto histórico-artístico más destacado del noroeste salmantino; una representación teatral al aire libre..... el escenario no podía defraudar, la propuesta era a priori atractiva, perfecta, inmejorable,...
Pero 'El Sendero del Ángel' ofrece mucho más: ofrece un buen guión narrativo -directo, y con continuas interpelaciones al público-; una gran actuación de los dos actores principales -Dani Gómez y Dani Cangas-; una cuidada escenografía y la sorprendente intervención de un grupo de niños y jóvenes, sorprendente no solo por su inesperada aparición en algunos lugares del recorrido (como en la Torre de las campanas y en la puerta del castillo), también por la calidad de la interpretación de estos extras, tal vez por su afición al teatro o tal vez por ser vecinos de la villa, sanfeliceños que llevan en la sangre los avatares de la historia de su pueblo.
El guión -elaborado por Aúla Teatro y mejorado en esta segunda temporada por Dani Gómez, director de la compañía Aúla Teatro y 'alma mater' de 'El Sendero del Ángel'- plasma la historia de San Felices de los Gallegos en lugares emblemáticos de la villa: la Plaza, la puerta de la iglesia, la Torre de las Campanas, el Castillo y el museo del aceite 'El lagar del mudo' -un guiño a la historia más reciente de la vecinos de la villa que tiene en el aceite uno de sus productos estrella-.
En la plaza de la villa, punto de partida de la ruta, los espectadores reciben del 'Ángel' -el guía- los primeros datos sobre el origen vetón de la villa. En la puerta de la iglesia parroquial se recuerda el gran incendio que sufrió el templo de estilo románico del siglo XII.
De paseo por las calles hasta el museo del aceite 'El lagar del mudo' los caminantes pasan por la puerta de una sinagoga, de la casa de un herrero, de una ermita, y saludan a los vecinos que toman el fresco "al serano'.
En el museo del aceite espera a los espectadores Vicenta, la esposa de Jesús, 'el Mudo', una entrañable muñeca (manejada por Dani Gómez, su biznieto) que interactua con el público, a la vez que evoca el pasado y el presente del lagar -recuperado como museo en el año 2002- donde los vecinos elaboraban el aceite, uno de los productos emblemáticos de San Felices.
La torre de las campanas, lugar de referencia en la historia de la villa
El arco de las Campanas -la torre que formó parte de una antigua muralla defensiva- fue escenario del motín de los lugareños contra la corona portuguesa, que terminó con el alcaide de la villa, Gracián de Sessé lapidado y colgado en la torre. Este hecho fue origen de la entrega de la villa de San Felices -por parte de la Reina Isabel La Católica- al ducado de Alba que no tardaría en imponer al pueblo el impuesto del Noveno -la novena parte de las cosechas-, impuesto que el pueblo denunció y que conseguiría suprimir 400 años más tarde. Hoy sigue celebrandose la Sentencia favorable cada año el día 11 de mayo, en la Fiesta del Noveno, fiesta de interés turístico de Castilla y León. Esta escena de la revuelta popular es una de las más espectaculares y emotivas de la ruta por la involucración y emotividad que trasmiten los niños y jóvenes actores.
La interacción de los actores con la historia y con el público queda también patente en las escenas representadas en el patio de armas y en la puerta del castillo, donde es reseñable la cuidada escenografía, las luces, los sonidos, los guiños humorísticos. La primera escena está relacionada con la presencia de las tropas francesas en la Guerra de la Independencia española contra la invasión napoleónica, la batalla librada en San Felices con Julián Sánchez 'El Charro' como abanderado.
En la puerta del castillo los espectadores son recibidos por doña Leonor de Castilla, que posteriormente sería Reina de Aragón, y sus hijas, a las que se suman los vecinos del pueblo.
Y el punto culmen del 'Sendero del Ángel' se vive con la inesperada, la sorprendente aparición de don Ángel en una ventana del castillo, don Ángel de Dios un vecino de la villa que en el siglo XX impidió que el castillo de San Felices de los Gallegos fuera comprado y trasladado a Estados Unidos.
El castillo levantado en el siglo XIII por el rey portugués Don Dinis, quién también levantaría las murallas defensivas de la villa y que adoptó su forma definitiva en el siglo XV, se mantiene hoy en pie gracias a don Ángel de Dios y a su hijo, el sacerdote Don Paco, que donó la fortaleza al pueblo de San Felices de los Gallegos.
Éxito y continuidad
La II edición de la visita guiada y teatralizada 'El Sendero del Ángel', promovida por el Ayuntamiento de San Felices, ha sido un éxito de participación de espectadores que han llenado el aforo los cuatro días de su representación. Con esta acogida se ha cumplido el objetivo de dar a conocer el patrimonio histórico y artístico de la villa a la gente de los pueblos cercanos y no tan cercanos.
El Consistorio, presidido por Marian Redero, que ha apostado por este proyecto y apoyado su ampliación, pretende darle continuidad y ampliar los días de la representación.