Una autobomba con base en La Fuente, novedad en la comarca en el dispositivo contra incendios

Tras permanecer toda la comunidad en riesgo medio de incendios forestales desde finales del mes de marzo (a través de sucesivas prórrogas), a partir del lunes 12 se da un paso más entrando Castilla y León en la época de peligro alto de incendios, que adelanta su arranque respecto a la fecha habitual, que era el 1 de julio. Asimismo, se retrasa un poco su finalización, del 30 de septiembre al 12 de octubre (por lo tanto, esta época de riesgo alto de incendios durará 4 meses exactos).

Durante estos días, la Junta de Castilla y León ha presentado el dispositivo de vigilancia, prevención y extinción de incendios forestales que va a tener activo a partir del lunes, resaltando de salida el refuerzo tanto de los medios humanos y materiales que forman parte del mismo como de la coordinación.

De forma específica, en la comarca de Ciudad Rodrigo habrá una novedad, ya que tendrá su base en La Fuente de San Esteban una de las nuevas autobombas de doble cabina con una pickup auxiliar que van a entrar en funcionamiento. Esta autobomba, única de su estilo en toda la provincia de Salamanca, cuenta con un conductor, un capataz y 5 peones.

Como otros detalles del dispositivo en la comarca mirobrigense que aparecen en las notas de prensa difundidas estos días a nivel regional y provincial por la Junta de Castilla y León, estarán operativas como siempre las bases de helicópteros de El Bodón y El Maíllo, donde también estará ubicado un avión de carga en tierra. Asimismo, en El Maíllo tendrá su base una de las dos cuadrillas nocturnas November (la otra estará en Guadramiro), que harán recorridos por toda la provincia.

En las notas de prensa donde se informa del dispositivo, la Junta de Castilla y León pide a la población que “extreme las precauciones a fin de prevenir imprudencias”. Respecto a las administraciones públicas, se les recalca que es “absolutamente importante” que realicen labores de desbroce y eliminación de vegetación anual agostada, creando una franja de protección pasiva. La propia Junta anuncia que tomará medidas en los montes que gestiona y en carreteras próximas a terrenos urbanizados, “eliminando ese combustible vegetal para disminuir el riesgo”.