Toda empresa que quiera constituir una base sólida a largo plazo, debe empezar a trabajar con los principios ESG, especialmente si existe la intención de atraer capital exterior a través de potenciales inversores
En los últimos años, los criterios ESG (environmental, social and governance, por sus siglas en inglés) se han convertido en una tendencia creciente para empresas de todos los sectores, destacando el financiero.
Cada vez más inversores y empresas están prestando especial atención a estos criterios, los cuales pueden ser clave de cara a la toma de decisiones en los tiempos actuales. Es importante conocer con detalle qué son los principios o criterios ESG, cómo es su aplicación y qué impacto positivo pueden llegar a generar de cara a obtener mejoras en un modelo de negocio.
Este tipo de principios, generalmente, son medidos por agencias de rating, que reciben la información de las propias empresas, trasladándolas a los clientes. Los inversores del sector financiero acostumbran a ser los que más se preocupan por los criterios ESG, pero son cada vez más los sectores donde clientes, accionistas, inversores y proveedores comienzan a tenerlos en cuenta a la hora de colaborar con los negocios.
Los criterios ambientales se centran en el impacto que genera la empresa en el medioambiente. Algunos de los principios ESG ambientales más importantes son:
Los criterios sociales están centrados en el trato que ofrece una empresa a sus empleados, proveedores, clientes y comunidades. Podemos destacar algunos de los más utilizados:
Los principios de gobierno están destinados a mejorar la toma de decisiones estratégicas y hacer de su gestión una labor más eficiente y efectiva:
A día de hoy, toda empresa que quiera constituir una base sólida a largo plazo, debe empezar a trabajar con los principios ESG, especialmente si existe la intención de atraer capital exterior a través de potenciales inversores.