Aunque no se pudo compartir la jornada al aire libre, se despacharon bocadillos en los lugares previstos
Fiel a su cita, a pesar del mal tiempo, este jueves, 23 de febrero, se realizaba la Operación Bocata de Manos Unidas en Salamanca. En concreto en el colegio Trinitarios, el Campus Unamuno y en las parroquias El Milagro de San José y Nuestra Señora Fátima.
Con la recaudación (cada bocadillo costaba 4 euros) se subvencionarán dos proyectos internacionales de esta ONG. Uno en Togo, para la construcción de seis aulas, un almacén y letrinas en Wadjado, por un importe de 75.000 euros, y 276 beneficiarios directos (2.000 indirectos), ya que como apuntan desde Manos Unidas de Salamanca, “ahora dan clase en un cobertizo de adobe cuando no llueve”. Y el otro proyecto, en el norte de India, se centra en proteger a los niños adolescentes marginados y sus familias, tiene un importe de 41.431 euros, para 1.110 beneficiarios directos, 5.500 indirectos.
Fotos de David Sañudo