En las primeras semanas del nuevo Año Hidrológico se ha producido un importante aumento del volumen de agua embalsada
La Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantuvo en la mañana del martes un encuentro (el 5º en lo que va de año, debido a la situación generada por la sequía) para analizar el desarrollo del Año Hidrológico 2021/2022, y aprobar la propuesta de llenado de los embalses durante el Año Hidrológico 2022/2023, según informa la CHD en una nota de prensa, en la que ofrece algunos datos numéricos de ambos apartados.
En lo que respecta al Sistema del Águeda, se incluyen varios datos sobre el balance del Año Hidrológico que llegó a su conclusión el pasado 30 de septiembre. Según señala la CHD, este Sistema fue el que registró durante ese período 2021/2022 el menor volumen de entrada de agua a sus embalses (el pantano y la presa de Irueña) de toda la Cuenca del Duero (no se han publicado los datos numéricos concretos).
Como otro dato estadístico relevante, esa cifra de entrada de agua al conjunto del pantano e Irueña fue un 79% inferior a la media de los últimos 25 años, una cifra bastante alejada del conjunto de la Cuenca del Duero, donde la reducción de agua respecto a la media del último cuarto de siglo fue del 39%, producto en todos los casos de “unas circunstancias climatológicas extremas, con largos períodos de temperatura récord y sin precipitaciones” (un 56% menos de lo habitual).
Respecto al Año Hidrológico iniciado el 1 de octubre, la Confederación apunta en torno al Sistema del Águeda que el cauce “ha experimentado un gran crecimiento y los embalses han conseguido incrementar su volumen de reservas de forma importante” tras las precipitaciones de las últimas semanas. En lo que respecta al pantano del Águeda, a las 15.00 horas de este martes 22 acumulaba 18,70 hectómetros cúbicos (cerró septiembre con 17,41 hectómetros); y la presa de Irueña, 54,71 hectómetros (concluyó septiembre con 40,87 hectómetros).