La víctima del tiroteo de Garrido recibió cuatro disparos y falleció por "un tiro que salió por el cuello"

Tercera sesión en la Audiencia Provincial de Salamanca por el juicio contra el ‘pistolero de Garrido’. El pasado martes comenzaba la vista oral por el crimen más fatídico que ha ocurrido en Salamanca en los últimos años, día en el que fue el turno de E.D.Y., acusado de los hechos que se declaró ante el tribunal que “no” recordaba los hechos, que “lo que quería era suicidarme” y pidió perdón a las familias y víctimas.

Hoy ha sido turno de los médicos forenses, encargados de practicar la autopsia del fallecido en el tiroteo. En primer lugar realizaron el levantamiento del cadáver en el lugar de los hechos, donde se encontraba el cuerpo del fallecido de 51 años, y una mujer, la otra víctima, que fue trasladada al complejo hospitalario. El varón presentaba, en "las ropas un extenso manchado de sangre", derivados de las diferentes hemorragias.

En lo que se refiere a la autopsia comunmente conocida, examinaron el cuerpo del varón tras hacer lo mismo con la ropa. "Encontramos varias lesiones sobre todo en el lado derecho" y presenta contuisones "compatibles con la caída y la posición en la que fue encontrado".

El cuerpo presentaba 9 orificios peor había 4 impactos de bala. El orificio que sale por el cuello, "es la lesión que consideramos la causa del fallecimiento". Además, según los diferentes análisis y pruebas complementarias, estiman que los disparos se realizaron a 50 centímetros, un metro de la víctima.

En conclusión, "el agresor estaba en la región posterior y a media distancia. La causa de la muerte es la hemorragia que sale del sistema vascular y la que desencadena el fallecimiento es una herida por proyectil de arma de fuego".

SESIONES ANTERIORES

En la segunda jornada, celebrada durante el miércoles, fue turno de la declaración de diferentes testigos, entre los que se encontraba Belén, una de las víctimas. La mujer continua un año después con una de las balas en la cabeza que le ha condicionado su vida: ha vuelto a casa de sus padres, no puede cuidar de su hijo y no recuerda nada de los hechos, solo que “no quería tomar nada con él”. Tras ella, fue el turno de otros testigos que reconocieron a E.D.Y. a través de una fotografía que se mostró.

Uno de los últimos testigos en declarar, todos tras un biombo, fue la única persona que vió los hechos, pues en ese momento se encontraba en el balcón de su casa fumando un cigarrillo. “Se dirigió al hombre y le pegó un tiro en la nuca, calló al suelo. Después tiroteo a la mujer; se fue como si no fuera nada con él".

E.D.Y. está acusado de los delitos de asesinato con alevosía, tentativa de asesinato con alevosía y tendencia ilícita de armas. La Fiscalía pide 36 años de cárcel y la acusación particular, 41 años y 6 meses más una indemnización de casi medio millón de euros. "Es muy difícil que hibiera sobrevivido a las lesiones".

El juicio finalizará mañana, viernes 18 de noviembre, en la Audiencia Provincial de Salamanca. Fecha en la que el jurado popular dará a conocer el veredicto.