El simulacro recrea una intrusión en la instalación con incendio y colocación de artefacto explosivo
La fábrica de Juzbado ha realizado el simulacro anual de emergencia, tal como recoge el Plan de Emergencia Interior de la instalación. En esta ocasión, el simulacro ha tenido como objeto la recreación de tres sucesos iniciadores: una agresión a la instalación por intrusión; un incendio que afecta a las instalaciones y una agresión a la instalación por amenaza contrastada de bomba.
El suceso se inicia cuando se activan los sistemas de detección del anillo de Seguridad del Doble Vallado con motivo de la intrusión en la instalación de dos personas que portan mochilas y que son posteriormente localizadas en el interior de la Nave Auxiliar. Los intrusos, a modo de distracción, provocan un incendio en la nave, en la zona de Talleres y Almacén General, lo que activa los detectores del Sistema de Protección Contra Incendios. Tras esto, los dos individuos se dirigen al Estacionamiento de Plataformas, en cuyo interior y junto a una de las plataformas estacionadas con material nuclear, depositan un bulto y emprenden la huida.
La Organización de Respuesta a Emergencias (ORE) evalúa la situación y toma la decisión de llevar a la instalación a condiciones estables y seguras. Para ello, se para el movimiento de material nuclear en las zonas Cerámica y Mecánica, así como los equipos de proceso, y se lleva la instalación de Modo Operación 1 a Modo Operación 4. Además, se procede a la evacuación de todo el personal presente en la fábrica.
Tras esto, se organiza la intervención de la Brigada Contra Incendios en la Nave Auxiliar para verificar el estado del incendio. Durante su actuación, se producen dos heridos por quemaduras que son trasladados al Servicio Médico de la fábrica. Tras una primera atención, se coordina su evacuación al centro hospitalario de Salamanca.
Mientras, operativos de la Guardia Civil llegan a la instalación y, tras un primer reconocimiento e intervención sobre el bulto sospechoso depositado en el Estacionamiento de Plataformas, verifican que se trata de un artefacto explosivo. Deciden avisar a los técnicos de desactivación de explosivos (TEDAX) y acordonan la zona a una distancia de 300 metros a descubierto y 35 metros a cubierto, lo que hace que el punto de reunión de la plantilla no sea seguro y se les traslade al Edificio de Oficinas para poner al personal a cubierto. Además, la Guardia Civil organiza la búsqueda de los dos intrusos en la exterior de la fábrica.
Los TEDAX llegan a la instalación y toman como base de operaciones el Centro de Control, consiguiendo posteriormente desactivar el artefacto explosivo.
En este punto, la Organización de Respuesta a Emergencias de la instalación, en coordinación con la Guardia Civil, valora la situación y define las acciones a poner en marcha para volver a la normalidad. Se declara así el fin del simulacro, que se ha desarrollado correctamente.