Normalmente yo he estado todos los años en Salamanca por el ocho de setiembre, y asistía a todos los acontecimientos notables de las fiestas de la Virgen de la Vega. Este año las vacaciones anuales de la residencia diocesana han coincidido en estas fechas y una docena de residentes nos encontramos en Chipiona (Cádiz), y aquí la patrona de la Villa es la Virgen de Regla, que se celebra también el ocho de setiembre.
Será bueno conocer algo de la Virgen de Regla. Para ello hay dos caminos: el camino de la leyenda y el camino de la historia. Según la leyenda, la imagen pertenecía al oratorio privado de San Agustín, y a su muerte (430 d.C.) la traen a España y, transportada por medio de una tempestad, llega a las costas de Cádiz, concretamente a la villa de Chipiona.
La historia tiene poco que decir. Se trata de una talla de transición del Románico al Gótico, probablemente de los siglos XII al XIII, aunque algunos la retrasan hasta el S. XIV.
Según la leyenda, durante la dominación musulmana la Virgen permanece escondida en un pozo. Pasados unos siglos, la Virgen se revela a un fraile agustino de León, que la rescata. La misma leyenda relata que la vela que encendieron los devotos al ocultarla permaneció encendida, y por ello, la cara de la Virgen se ennegreció. Como buena madre, ha protegido a su hijo y, por eso, el niño mantiene su color original.
La historia, en cambio, afirma que la Virgen es morena desde su origen al estilo de algunas de las imágenes de las vírgenes de la época. En el siglo XVI le colocan una envoltura de plata para evitar los excesos de los fieles que extraían astillas de la talla para llevárselas como reliquias. Poco después de esta fecha la imagen aparece ya vestida como en la actualidad.
La Virgen de Regla goza hoy de una gran devoción por parte de los chipioneros, de toda la comarca vecina, y aun de lugares lejanos de toda España.
Chipiona es hoy muy conocida gracias a la cantante chipionera Rocío Jurado, que nació aquí y aquí permaneció, viniendo cada año hasta el fin de sus días, siempre como una gran devota de su Virgen de Regla. Chipiona reconoce el amor de Rocío por su villa, y recientemente ha abierto un museo con abundancia de prendas pertenecientes a la cantante. Ya antes tenía una estatua y otras manifestaciones de agradecimiento. En el museo se muestra cercana, casi presente, la gran cantante. Por ejemplo, allí está expuesto el vestido azul con ribetes azules y estilo marinero que llevaba Rocío Jurado en una procesión de su querida Virgen de Regla.
La devoción a la Virgen de Regla es cultivada por los padres franciscanos, que celebran su novena y sus fiestas con gran esplendor, acompañados por multitud de peregrinos y devotos todos esos días.
Este año las fiestas han sido proclamadas con una Eucaristía solemne, y con la presentación del cartel de fiestas el pasado 5 de agosto, un mes antes de la fiesta. La novena ha sido predicada por tres sacerdotes que ocuparon tres días cada uno, con gran relieve del discurso y profundo mensaje mariano. Las celebraciones son todas transmitidas y se pueden seguir desde cualquier lugar por el canal youtube del propio santuario.
La víspera tuvieron un rosario de la aurora que comenzó a las siete de la mañana en la parroquia y contó con gran cantidad de devotos, terminando con la misa a las ocho de la mañana en el Santuario. La Misa Mayor tuvo lugar a las once de la mañana del día de la fiesta, 8 de setiembre, y fue presidida por el provincial de la orden franciscana. La jornada terminó a las seis de la tarde con la magna y tradicional procesión en honor a Nuestra Señora.
El paralelo de nuestra Virgen de la Vega ha contado también con su novena, conducida cada día por una organización eclesial diferente, y la fiesta del día ocho a las doce fue presidida por el obispo diocesano, Mons. José Luis Retana, en la Catedral Nueva, con asistencia del alcalde de la ciudad, que hizo la ofrenda de la villa con un breve y elocuente discurso. También asistió el salmantino presidente de la Junta de Castilla y León Alfonso Fernández Mañueco. La víspera precedió la solemne procesión y la concurrida ofrenda floral, que también se dio en el caso de la Virgen de Regla, con entrega de la vara de gobierno municipal entregada por el alcalde local, para reconocer el hecho de haber sido proclamada alcaldesa permanente de la villa el año 1904.
Las fiestas locales, más allá de las religiosas, han sido acompañadas este año en Salamanca por multitud de actos culturales y festivos, que son las delicias de los vecinos de la ciudad de Salamanca.
Viva la Virgen de la Vega y la Virgen de Regla, y que gocen y se aprovechen de su protección los vecinos de Chipiona y Salamanca.
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