La obra cautiva al numeroso público asistente
En el pequeño pueblo de la comarca peñarandina El Campo de Peñaranda tuvo lugar la puesta en escena de la obra teatral 'Buscando a Nebrija', por el grupo Lazarillo de Tormes en su iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, cuyo retablo alberga una auténtica tabla del Resucitado, de Fernando Gallego, autor de nuestro conocido Cielo de Salamanca.
El numeroso público asistente permaneció arrobado ante los personajes que les llevaron a una época que les envuelve, con toda la fuerza y huella de esa vida intensa de Nebrija, a través de la música del que fuera su alumno Juan del Encina y una escenografía que hace aún más original el guión de Denis Rafter. La obra entrelaza con soltura rítmica escenas, diálogos chispeantes, irónicos, divertidos y en ocasiones duros, junto a poemas y textos salidos de la boca y pluma del gramático de la lengua castellana.
El viaje de la vida y obra del humanista se desarrolla con la misma agilidad con la que las palabras van construyendo el perfil de este hombre intelectual y erudito. Y eso se consigue con un juego de contrarios que conforman los que fueron defensores o detractores de su figura, coetáneos que le amaron y odiaron con igual intensidad.
'Buscando a Nebrija' continúa con su reiterada puesta en escena, que aunque siempre la misma, es diferente para cuantos a ella se acercan incluso en varias ocasiones, quizá porque todo lo que es bueno, ni cansa a quien lo da ni a quien lo recibe. Convencida de ello, el Área de Cultura de la Diputación de Salamanca sigue apostando por llevar el saber, vida y obra de Nebrija, en este V Centenario de la muerte de Elio Antonio, el mayor humanista español.