El montaje cuenta con elementos circenses, que también fueron los dominantes en el montaje ‘Kasumay’ que se representó en Bolonia
La programación al aire libre de la tarde del Jueves de Feria incluyó un estreno absoluto: la versión de calle del montaje Disculpa si te presento como que no te conozco de La Pequeña Victoria Cen y Miguel Barreto, que como explicó antes de empezar la función –especialmente a los programadores asistentes- el director de la Feria, Manuel Jesús González, cuenta con una versión en sala con una iluminación más cuidada, y más elementos escénicos.
Esta versión de calle es más ‘simple’, centrándose únicamente en los dos protagonistas, interpretados por Pablo Parra y Miguel Barreto (que también son los creadores y directores de la pieza), cuyos cuerpos juegan a encontrarse y a descubrir cómo se ven desde fuera, a través de un lenguaje de circo y danza. En este sentido, al juntarse, bailan y juegan con la simetría, la duplicidad y la ambigüedad configurando diálogos acrobáticos y escenas oníricas.
Aunque ha sido una versión de calle, realmente no se desarrolló en la calle propiamente dicha, sino en un espacio al aire libre de pago: el patio del edificio de la calle Velayos del Colegio Misioneras de la Providencia-Santa Teresa, que este viernes a las 20.00 horas acogerá un segundo pase de la obra.
A la hora de comenzar en la tarde del jueves Disculpa si te presento como que no te conozco, todavía estaba en marcha el 4º y último pase en esta Feria de Qubim, de las compañías portuguesas Trupe Fandanga y Circolando. Al igual que por la mañana, este pase tuvo lugar en el Parque de La Glorieta, donde se introdujo la furgoneta repleta de cajas en su parte trasera de la que se van sacando marionetas. Pese a que coincidía con el pasacalles de Trans(h)umância, este último pase también registró una alta asistencia de público.
La programación de calle del Jueves se completó una noche más en los Jardines de Bolonia, con un nuevo espectáculo de tipo circense, en este caso Kasumay de la compañía vasca Circo Los. Este montaje presenta a tres personas, interpretadas por Antonio Correa, Igor Buzato y Rosa Peláez, que tienen que aprender a convivir los unos con los otros y aceptar sus locuras, contando el espectáculo con números con monociclos, malabares, acrobacias, portés, trapecios dobles o patines acrobáticos.
Como se puede ver en las imágenes, el montaje congregó a una gran cantidad de público, que tuvo la oportunidad de hacer un viaje a los años 60-70 en los que está ambientado el espectáculo, que tiene importantes dosis de humor para hacer ver que con el mismo “podemos superar cualquier obstáculo”.