Ya está colocada la celosía metálica quebrada para separar la Plazuela del espacio triangular que hay entre la Catedral y la muralla
Poco a poco se van encaminando hacia su final las obras de remodelación de las que está siendo objeto la Plazuela de Amayuelas de Ciudad Rodrigo, que tiene entre sus nuevos elementos más destacados la habilitación de un nuevo foso anexo al lienzo de la muralla. Como ya hemos explicado en varias ocasiones, este foso –donde ya está creciendo la vegetación- queda delimitado por unos bloques-banco con formas irregulares, para evocar el dramatismo de los hechos históricos que tuvieron lugar allí hace 210 años.
De esos bloques irregulares sale una escalera (justo enfrente de la placa de bronce que hay en el lienzo de la muralla) que permitirá a cualquier persona que lo desee ‘bajar’ al foso propiamente dicho. El objetivo de esa escalera, según se explicaba en el proyecto, es unir el nivel de la plaza, como representación del presente, con el foso, que remite al pasado. Tanto en el foso, como en el nivel de plaza, se han plantado varios árboles (en el proyecto se recogía que en total se van a plantar 6 cipreses).
Por otro lado, como también se puede ver en las imágenes, ya se ha desplegado una celosía metálica quebrada para separar la Plazuela propiamente dicha del espacio triangular sin uso que hay entre la Catedral y la muralla. Parte de esa celosía metálica va a servir como barandilla de la escalera que conecta la Plazuela con el adarve, que como ya hemos mencionado ha cambiado de posición, quedando ahora situada por detrás del antiguo muro de cerramiento de la construcción que delimitaba el rincón norte de la Plazuela. El lugar donde estaba el acceso a la escalera desde el adarve no se ha ‘tapiado’, sino que ha quedado como un ‘balcón mirador’ sobre la nueva imagen de la Plazuela.