El sofocante calor en tierras extremeñas no frena el ambiente festivo
Las fiestas de San Buenaventura tienen un invitado que se hace notar, el sofocante calor al que los extremeños torean con cierta facilidad haciendo huella en los forasteros de otras comunidades más frescas que estos días inundan la Villa de Moraleja.
Tras el acto solemne de misa y procesión del Santo Obispo, tuvo lugar el primer encierro urbano con seis novillos de la ganadería local de Castillejo de Huebra, que protagonizaron un rápido y limpio encierro en el que no tuvo que lamentarse ningún percance.
Las reses llegaron rápidamente a la plaza donde por la tarde serían liados en la tarde del jueves en una novillada con picadores para los aspirantes a matadores Francisco Montero, de Chiclana (Sevilla), que hacía su despedida como tal para tomar próximamente la alternativa el próximo 24 de julio en la Plaza de Orthez (Francia), siendo esta la primera alternativa que se concederá en la historia en esta plaza. El futuro diestro, se enfrentará a ganaderías de Dolores Aguirre y Juan Luis Fraile.
Los cuatro restantes de Castillejo de Huebra serían para el placentino Alejandro Mora y para García Corbacho de Badajoz.
Una vez terminado el encierro callejero, tuvo lugar la suelta de una vaquilla en el coso taurino del centro del casco urbano, donde los mozos más valientes mostraron sus destrezas ante el animal astado.