El creciente calor no desanimó a los habituales de las rutas dominicales en bici
Aunque el calor empezaba a ser notorio, y la noche del sábado había sido larga para muchos mirobrigenses, en la mañana dominical no faltaron las rutas en grupeta por el entorno de Ciudad Rodrigo por parte de unos cuantos ciclistas, dos de los cuales se animaron incluso a recibir en el tramo final de la mañana la bendición de San Cristóbal en la procesión organizada por la Parroquia del mismo nombre. Como suele ser casi ‘obligado’ tras estas rutas, al concluirlas fue turno para irse a tomar un refrigerio para reponer fuerzas, como los dos ciclistas que aparecen en esta imagen en la terraza de un bar del barrio de San Cristóbal, junto a otros amigos, luciendo la vestimenta del Club Correlindes.