Se trata unidades de soporte vital avanzado dotadas de personal de enfermería y técnicos de emergencias sanitarias, cuya función es la atención de las urgencias y emergencias en el lugar donde se producen
El viceconsejero de Asistencia Sanitaria, Planificación y Resultados en Salud, Jesús García-Cruces Méndez, ha presentado hoy las cinco primeras Unidades de Enfermería de Emergencias de Sacyl (UENE), un nuevo recurso asistencial de la Gerencia Regional de Salud que se pone en marcha para dar respuesta a la realidad sanitaria de la Comunidad, con unas características demográficas y epidemiológicas que exigen la actualización y desarrollo continuo del sistema de Emergencias Sanitarias para conseguir la adaptación a necesidades cambiantes.
Las cinco primeras ambulancias de este tipo estarán ubicadas en Cuéllar y Boceguillas (Segovia), Fermoselle (Zamora), Guardo (Palencia) y Vitigudino (Salamanca), atendiendo a criterios técnicos de accesibilidad. Según ha podido saber LAS ARRIEBS AL DÍA, la ambulancia que tendrá su sede en Vitigudino podría entrar en funcionamiento el 8 de julio.
Las UENE son unidades de soporte vital avanzado dotadas de personal de enfermería y técnicos de emergencias sanitarias, cuya función es la atención de las urgencias y emergencias en el lugar donde se producen, la estabilización del paciente y el traslado, si precisa, al centro sanitario más adecuado, bajo un sistema protocolizado de activación y de actuación en el lugar. Además, estas unidades cuentan con un médico consultor situado en el Centro Coordinador de Urgencias (CCU- Sacyl), profesionales que han recibido una formación específica para este tipo de asistencia.
Este recurso prestará una atención protocolizada basada en la “Guía de Procedimientos operativos de UENE-CCU de Castilla y León”, en la que tanto el enfermero asistencial como el médico consultor se apoyarán para prestar una atención conjunta al paciente.
Así, el médico consultor del CCU realizará el seguimiento del incidente estableciendo la resolución de este, en consonancia con los procedimientos, la operativa y la información del enfermero que se encuentre realizando la asistencia in situ, y tomará las medidas que considere adecuadas dependiendo de la situación inicial y la evolución.
La UENE será activada por el CCU para acudir a un incidente sanitario según los protocolos vigentes, y una vez en el lugar, el enfermero de estas unidades realizará una valoración y actuará según procedimiento estandarizado correspondiente, en cuanto a realización e interpretación de pruebas diagnósticas, transmisión de datos obtenidos (incluyendo imágenes de electro y resultados de las pruebas) al médico consultor del CCU, quien establecerá el diagnóstico médico, que prescribirá o validará el tratamiento a administrar y las intervenciones a realizar por el enfermero, así como la decisión de traslado/alta.
Se trata por tanto de aumentar la capacidad asistencial de Sacyl para atender las urgencias en el ámbito extrahospitalario, mejorando tanto la accesibilidad (en especial para los procesos tiempo-dependientes), como la adecuación de los recursos a movilizar, sin menoscabo de la calidad de la atención y garantizando la seguridad del paciente.
En concreto, estas unidades disponen de una ambulancia tipo C con el equipamiento necesario para prestar soporte vital avanzado (las conocidas como UVIS móviles, ajustadas al Real Decreto 836/ 2012 del 25 de mayo).
El profesional de enfermería de una UENE, además de poseer la capacitación necesaria y acreditar años de experiencia en el campo de la asistencia en urgencias y emergencias, ha recibido una formación específica para desempeñar su labor en estas nuevas unidades, adquiriendo un conocimiento exhaustivo de los procedimientos específicos, en coordinación con el médico consultor del CCU, que actuará como decisor en los ámbitos de su competencia: valoración de pruebas complementarias, diagnóstico médico y prescripción farmacológica fuera de los protocolos establecidos o complementando/validando a los mismos.
En otras comunidades autónomas, así como en otros países del mundo, estas unidades se encuentran afianzadas dentro de sus sistemas (en Cataluña funcionan desde 1989, pero están operativas también en Baleares, Aragón, Castilla-La Mancha, Madrid, etc.), sumándose al resto de recursos de los que disponen los servicios de salud con el objetivo de aumentar la oferta y la calidad de los servicios prestados, en este caso en el ámbito de la atención urgente.