Los timadores llaman por teléfono al establecimiento y se hacen pasar por un alto cargo de la empresa para solicitar el pago inmediato de una gran cantidad de dinero
La Policía Nacional de Salamanca alerta sobre una estafa telefónica cometida con bitcoins, que aunque no es novedosa, si se está produciendo un repunte a nivel nacional y también en comercios de la ciudad charra.
El modus operandi es común en todos los casos que han sido denunciados en dependencias policiales. En primer lugar se recibe una llamada en el teléfono del establecimiento, en el que un varón dice ser un alto cargo de la empresa y llama advirtiendo de la entrega de un paquete que contiene pólizas de seguro, o cualquier otro tipo de documentación y que es imprescindible proceder a su pago, para evitar una elevada multa a la empresa.
El estafador habla directamente con el empleado del negocio y le hace creer que su encargado es conocedor de las circunstancias y de la necesidad del pago, y para ello simula tenerlo al teléfono por otra línea.
Para evitar que el trabajador pueda usar su teléfono móvil, le solicitan el número particular para a continuación inmediatamente realizar otra llamada, normalmente haciéndose pasar por la compañía de transportes que ha de realizar la entrega; o nuevamente el estafador para continuar dándole directrices y de esa forma consiguen tener incomunicada a la víctima.
Le solicitan que en ningún momento cuelgue el teléfono móvil y le dan instrucciones para que se desplace a algún establecimiento, normalmente alejado de la ubicación en la que se encuentra, y realice el ingreso con el dinero que existe en la caja, remitiéndola en concreto a algún cajero que admita ingresos en Bitcoins y le manda la cuenta de destino mediante código QR.
Cuando el estafador comprueba que la víctima ha caído en la estafa, intenta conseguir más beneficio, engañándola nuevamente, al decirle que el dinero no ha llegado a la cuenta facilitada, y que le va a remitir nuevamente otro código QR, para que pueda realizar nuevos ingresos, y que los deberá llevar a cabo con tarjetas de diferente importe que debe adquirir en el mismo lugar.
Con este modus operandi, en algunos casos el importe solicitado asciende a varios miles de euros, por lo que al no disponer de suficiente dinero, el estafador le pide al empleado mediante falsas promesas de devolución, que abone los ingresos con su propio dinero.
Desde Policía Nacional, se recomienda no hacer caso a la llamada, colgar y ponerse en contacto con el encargado del negocio o con la persona que el estafador haya utilizado como garantía de la necesidad del pago, interponer denuncia y facilitar los datos aportados por los estafadores.
Se recuerda, además, que desde la Delegación de Participación Ciudadana de la Policía Nacional, a través del Plan Comercio Seguro, se está en contacto permanente con los establecimientos comerciales para dar consejos sobre prevención y a la vez establecer canales de interlocución bidireccionales.