En el caso de Salamanca, se ha puesto en marcha un servicio de cajeros automáticos instalados en los Bibliobuses que recorren la provincia
Para paliar el impacto de la exclusión financiera en el medio rural tras el cierre de numerosas oficinas bancarias en los últimos años, las Diputaciones Provinciales de Castilla y León han puesto en marcha diferentes iniciativas, con fórmulas que pasan por tratar de que los ayuntamientos aporten edificios de su titularidad en los que puedan instalarse cajeros o incluso personal de entidades colaboradoras con las que se pueda contar; por la licitación de cajeros móviles, o el aprovechamiento en algún caso del servicio del Bibliobús para cubrir, junto con el servicio cultural, otro tipo de servicios financieros -es el caso de Salamanca-.
También hay otras iniciativas en Castilla y León como la colaboración con Correos para la instalación de cajeros, implementar los servicios disponibles en los puntos de atención que tiene Correos en las pequeñas poblaciones, y para cubrir necesidades como la de obtener dinero y pagar tributos a través de los carteros rurales a los que podrán acudir los vecinos; por habilitar transportes a demanda que permitan a los vecinos desplazarse a los lugares más próximos en los que puedan hacer sus operaciones bancarias; e incluso, promover el uso de las tarjetas y otros instrumentos de pago telemático entre los ciudadanos previas acciones de formación en estos ámbitos.
En el caso de Salamanca, la respuesta de la Diputación ha sido la puesta en marcha de un servicio de cajeros automáticos instalados en los Bibliobuses que recorren la provincia, uniendo así dos servicios esenciales para aquellos municipios que por su población y capacidad económica carecen no sólo de los servicios financieros, sino también de servicios culturales. Cada uno de los Bibliobuses tiene asignadas 65 localidades repartidas en 16 rutas, que se repiten cada 28 días, visitando diariamente entre 3 y 5 pueblos. En el año 2022, por primera vez, se han programado salidas durante el mes de julio, para poder ofrecer el servicio de cajeros a los numerosos visitantes que la provincia recibe en esas fechas.