En opinión de Isabel Álvarez, activista en la Coordinadora Baladre y presidenta de la red Urgenci: “Es necesario recuperar la visión de especie y personas interdependientes y evitar pensar que solas podemos sobrevivir en este planeta”
Organizada por la Red de Saberes y Sabores del Bajo Tormes, en colaboración Adecasal, Escuelas Campesinas de Salamanca y Asdecoba, el pasado sábado 30 de abril se celebró en Monleras una jornada de encuentro y foro de reflexión con el objetivo de abordar en profundidad el reto de la alimentación en clave de soberanía alimentaria.
La convocatoria logró reunir a unas cuarenta personas en una jornada rica en contenidos, estructurada en torno a cuatro grandes ejes temáticos que se desarrollaron a lo largo del día:
Para orientar la reflexión, las entidades organizadoras habían invitado a Jeromo Aguado, fundador de la Plataforma Rural y miembro del movimiento internacional La Vía Campesina (quien no pudo acudir por contagio de covid, aunque dejó su aportación) y a Isa Álvarez, activista en la Coordinadora Baladre y presidenta de la red Urgenci, aunque con la pretensión no de que asumieran el protagonismo de la jornada, sino de que ayudaran a desentrañar las claves desde las que profundizar en la reflexión compartida y debatir en los grupos de trabajo.
En el debate se puso sobre la mesa la dificultad de un número cada vez mayor de personas, tanto en el medio urbano como en el rural, para acceder a una alimentación nutritiva y saludable, así como la urgencia y la responsabilidad de construir otros modelos de producción y alimentación que devuelvan al mundo rural su papel como productor de alimentos sanos para la humanidad; que restituyan el reconocimiento social a los campesinos y campesinas que los producen; que establezcan nuevas relaciones de cercanía y confianza entre productores/-as y personas consumidoras; que incentiven las redes comunitarias de distribución de alimentos y los mercados locales; que incentiven la producción agroecológica, con estímulos para atraer a los jóvenes al trabajo de la tierra, y el consumo responsable, de cercanía y kilómetro cero, a través de iniciativas de economía social y solidaria.
“Comunidad y educación”, claves para el cambio
Las intervenciones en los distintos foros se centraron en el actual panorama alimentario en el marco del debate actual de la España vaciada, del por qué se llenan un espacios y se vacían otros, de qué depende, recorrido histórico de los sucedido y cómo los pueblos se han vaciado y por qué, lo que ha obligado a los que se han quedado en el medio rural a dimensionar su negocio o explotación para sobrevivir, situación que ha conducido a la dificultad de poder diferenciar lo que es “un mero producto comestible o lo que es un alimento”, señalaba Isabel Álvarez en declaraciones a LAS ARRIBES AL DÍA.
En este mismo debate se ha puesto de manifiesto cómo la desigualdad forma parte del sistema. Sobre posibles soluciones para cambiar la actual dinámica alimentaria, se apuntó la necesidad de trabajar y participar en espacios como esta jornada celebrada en Monleras, todo un desafío por lo que supone ir contracorriente y contra el actual sistema capitalista. Otro de los factores que han desencadenado la situación actual y que salieron en el debate fue la educación y la necesidad de generar y preservar los espacios comunitarios. En opinión de Isabel Álvarez “es necesario recuperar la visión de especie y personas interdependientes y evitar pensar que solas podemos sobrevivir en este planeta”, por lo que sugirió como palabras clave de esta reflexión “comunidad y educación”, además de una crítica hacia las instituciones “que van en contra de lo que nos gustaría”.
Precisamente, el papel que juegan las administraciones en la soberanía alimentaria centraría el debate de la tarde. En este capítulo se abordaría la carta sobre soberanía alimentaria realizada en 2014 por varios colectivos sociales, y dirigida a los municipios como guía, un documento en el que se relacionaban acciones con las que transformar el sistema actual. Como reflexión de este repaso en el tiempo a la soberanía alimentaria, quedó de manifiesto “la necesidad de reforzar los espacios colectivos comunitarios, generar espacios en el ámbito municipal dejando claro cuál es el papel del Ayuntamiento, entendiendo que ayuntamiento y municipio no son sinónimos; así como la necesidad de ser creativos y usar todos las herramientas que tengamos a nuestro alcance para transformar lo que necesitamos. No vamos en la velocidad que nos gustaría pero al final el propio sistema no se sostiene ni energéticamente ni socialmente. No va a ser una transición amable, como nos gustaría que fuera, y por eso hay que ir construyendo iniciativas para cuando toque”, un objetivo para que aún estamos a tiempo, según Álvarez, a la vez que señalaba que muchos de los pasos dados en este sentido “no se ven”, por lo que señaló que otro de los restos “es hacer esas cosas visibles”.
Esta actividad se enmarcaba dentro del programa Gente y Tierra, que comparten las asociaciones convocantes y que cuenta con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.