El colegio Rufino Blanco de Salamanca apuesta por entorno saludable y sostenible

El C.E.I.P Rufino Blanco de Salamanca ha conseguido implicar a su alumnado en el cuidado de su entorno más cercano: el patio de su colegio, para transformarlo en un espacio limpio y verde. Con ello también fomentan la preocupación de los más pequeños por los hábitos saludables y por algunos de los objetivos de la Agenda 2030 (ODS 3, 12 Y 13). Una iniciativa 100% Savia que merece la pena conocer.

Hace 3 años, este centro escolar de Salamanca, donde se cursa educación infantil y primaria vio la necesidad de tomar cartas en un asunto que afectaba a su actividad diaria: un patio lleno de residuos tras cada recreo, que evidenciaba además, el carácter poco saludable de muchos almuerzos, siendo los alimentos procesados los que habitualmente llevan más envasado y generan mayores restos plásticos. En ese momento, se crea en el centro la “Comisión verde”, un organismo formado por un/a alumno/a de cada clase, a partir de 5 años, que se reúne cada primer miércoles de mes con la Jefatura de Estudios del colegio para trabajar, de forma conjunta, en soluciones enfocadas a hacer del colegio un entorno saludable y sostenible y promover conductas que vayan en la misma línea.

Marian Ovejero, jefa de estudios del centro destaca “la gran implicación” del alumnado en esta Comisión Verde, a la que acuden cada mes con ganas de aportar y felices de sentirse partícipes de las mejoras que se llevan a cabo en su centro en materia de sostenibilidad.

La primera medida adoptada por esa Comisión fue la instalación de papeleras de distintos colores para permitir la separación de residuos pero pronto consideraron que era necesario dar un paso más y enfocar la acción desde un punto de vista más integral. Así nació la idea de promover los almuerzos saludables y que no generan residuos, lo que generalmente va directamente relacionado, impulsando el uso de tuppers y botellas reutilizables. Cada clase dispone de unas bolsas de rejilla, de la que se encarga una persona de cada aula y es ahí donde los niños y niñas pueden depositar sus recipientes tras el almuerzo, para que no interfieran en su momento de juego y, posteriormente, puedan recogerlo para llevar de nuevo a casa. Un sistema simple, que facilita y fomenta el uso de envases reutilizables y el consumo de alimentos más saludables y sin aditivos.

Estos almuerzos sanos son, además, un medio para que cada clase trabaje por un objetivo común: la construcción de su propio rincón verde en el patio del colegio. Todas las clases tienen lo que denominan un “huerto virtual” y cada 3 días que una clase, en conjunto, consigue llevar un almuerzo saludable, obtiene una “cesta” que se plasma en una plantación en ese huerto virtual. Cuando una clase obtiene 3 cestas, la acción se transforma en algo físico y tangible y el grupo recibe un regalo: una maceta, una jardinera, tierra, semillas de flores… de este modo, progresivamente, cada clase va creando y viendo crecer su jardín en el patio del colegio, originando un rincón verde que sirve para crear un patio más saludable y lleno de vida.

Pero las actividades de esta Comisión Verde no se quedan ahí, este curso, con motivo de la erupción volcánica en La Palma, ha establecido los “Piernes”, relacionando el último día de la semana con el consumo de plátanos canarios a la hora del recreo y uniendo, de ese modo, la solidaridad y la sostenibilidad para educar a las futuras generaciones en valores que puedan contribuir a afrontar los retos a los que nuestra sociedad se enfrenta. Además, la Comisión grabó un podcast animando a unirse a la inicitiva y cada semana, se difunde en el centro escolar para llamar a la adhesión del alumnado y sus familias a esos “Piernes”.

Otra de las actividades impulsadas este año es la plantación de bellotas. Germinarán estas bellotas en el centro y después se realizará una plantación en el municipio de Villavieja de Yeltes, para que puedan experimentar ese trabajo en el medio natural y la puesta en valor de los recursos naturales que nos rodean.

Todo un programa de concienciación e implicación medioambiental enfocado en los salmantinos del futuro, en niños y niñas que ven la necesidad de implicarse en un entorno más sostenible y adoptar hábitos saludables que contribuyan a cuidar el medio ambiente y su propio bienestar. Ellos y ellas con parte de un futuro más “savio” para Salamanca.