Este templo religioso de Salamanca conserva las cenizas de los difuntos y facilita las visitas de las familias a sus seres queridos
La Iglesia de Santa María Magdalena, ubicada en la Calle Zamora, ha instalado un nuevo columbario. Gracias a su céntrica ubicación, en una de las avenidas peatonales más transitadas de la capital charra, facilita las visitas de las familias a sus seres queridos difuntos. Además, este columbario recupera la tradición eclesiástica de custodiar les cenizas de los difuntos en un lugar sagrado para aquellos feligreses que deseen seguir vinculados a su fe cristiana.
De esta manera, los familiares pueden depositar las cenizas de sus seres queridos en un espacio sagrado, cercano y simbólico con fuertes lazos emocionales y espirituales para ellos. El columbario presenta tres modalidades: la individual con espacio para una única urna; la pequeña para dos y la mediana con capacidad para cuatro urnas.
La bendición del columbario se ha realizado en la misma iglesia el domingo 27 de febrero a cargo de Florentino Gutiérrez, Vicario General de la Diócesis de Salamanca. A este acto han asistido los feligreses de la parroquia.
La Iglesia de Santa María Magdalena de Salamanca, aunque el templo se fundó en el siglo XII, data de 1894 cuando los frailes de la orden de las Carmelitas Descalzos regresaron a Salamanca, se instalaron en la iglesia y, al lado, construyeron el convento que contemplamos hoy en día.
En la fachada destaca la Cruz de Alcántara, insignia de la Orden de Alcántara, creada en 1156 en el Reino de León y adoptada como orden religiosa-militar de caballeros de Salamanca. En 1917 se restauró el interior del templo en estilo neo-plateresco.