Fueron reconocidos Lauren Risueño, María Paz Salazar Acha y Manuel Pérez de Burgos (a título póstumo)
Después de los actos solemnes desarrollados a lo largo de la mañana, la jornada festiva de San Sebastián en Ciudad Rodrigo se completó en el Teatro Nuevo Fernando Arrabal, con un doble acto presentado por la delegada de Comunicación del Ayuntamiento, Laura Vicente, al que acudieron un amplio número de mirobrigenses. El primero de esos actos que acogió el Teatro Nuevo fue la entrega de las distinciones de Mirobrigenses Ilustres que fueron acordadas por el Consistorio hace un par de semanas, con las cuales se amplía el “particular ‘Paseo de la Fama’” de Ciudad Rodrigo, como lo definió Laura Vicente.
Así, tras las distinciones en años previos de Joaquín Sánchez ‘Tato Galerías’, Agustín Sánchez Gómez ‘Moriche’ (a título póstumo), José David Flores Félix y Jaime Bajo da Costa, este año los tres distinguidos por “el compromiso que han mantenido durante su vida con Ciudad Rodrigo”, vienen “de la mano de la música y la cultura”.
En primer lugar, se reconoció a título póstumo a Manolo Pérez de Burgos Dias, quién fuera durante 35 años director de la Banda Municipal de Música de Ciudad Rodrigo, de la que en total formó parte durante más de 65 años. Al acto en el Teatro asistió gran parte de su familia, subiendo al escenario a recoger el diploma de reconocimiento uno de sus hijos, Luismi Pérez de Burgos, quién lucía la capa charra de su padre, “que tanto solía lucir hoy”.
Recordando que sobre esas tablas “se movía como pez en el agua dirigiendo a la Banda”, evocó que su padre era un hombre “humilde y sencillo”, resaltando su especial vinculación tanto con la Virgen de La Soledad (“a la que está tan vinculada la familia”) como con la Banda, “que no dejó de disfrutarla hasta el último día de su vida”. Por último, le mostró su agradecimiento por “la rica herencia inmaterial que nos ha dejado, su amor a Ciudad Rodrigo”, añadiendo que “siempre estarás vivo en nuestros corazones”.
A continuación, se distinguió a María Paz Salazar Acha, quién ha destacado por sus amplios estudios de la historia de Ciudad Rodrigo, en especial sobre sus linajes nobiliarios, que desgraciadamente ha tenido que interrumpir debido a una enfermedad que la mantiene desde hace tres años en una residencia en Pamplona de la congregación religiosa del Sagrado Corazón de Jesús a la que pertenece, como explicó su hermano Jaime, quién recogió la distinción.
Tras oír de boca de Laura Vicente el amplio currículum de su hermana, Jaime Salazar dijo que “no sabía que había hecho tantas cosas”, destacando algunas de ellas, como por ejemplo todo el volumen de información que ha recopilado sobre Ciudad Rodrigo. Por último, mostró su agradecimiento al Ayuntamiento y a la ciudad por el reconocimiento.
El único de los tres distinguidos que pudo estar presente en el Teatro Nuevo Fernando Arrabal fue Laurentino Risueño Pérez, “la voz de Ciudad Rodrigo”, según le definió durante el acto el alcalde Marcos Iglesias. Lauren Risueño se mostró muy emocionado por el reconocimiento, indicando que “el único mérito que tengo para recibir esta mención es el cariño tan inmenso que tengo y que he derrochado por mi querido Ciudad Rodrigo”.
En este sentido, explicó que “a lo largo de tantos años queriendo a Ciudad Rodrigo” ha estado “inmerso en montones de situaciones y cosas que he hecho con tanto cariño por Ciudad Rodrigo”. Por último, mostró su “alegría” por “compartir este galardón con dos personas muy queridas, los dos son amigos”, dedicando unas palabras tanto a Manuel Pérez de Burgos como a María Paz Salazar Acha.
Entregados los tres reconocimientos, el alcalde Marcos Iglesias ofreció unas palabras sobre cada uno de los homenajeados, resaltando que era “un día importante para los mirobrigenses, para una ciudad que vive sus tradiciones”. El alcalde cerró su intervención con vivas a San Sebastián, a Ciudad Rodrigo y a España.