Mañueco y los consultorios médicos

Hace escasos días, en un acto del PP de Salamanca, el presidente de la Junta y aspirante a repetir ese sillón por los populares, Alfonso Fernández Mañueco, lanzó a la prensa cual promesa novedosa que blindaría los consultorios médicos rurales para asegurar la atención presencial en ellos.

Sin embargo, ante dicha promesa de precampaña, no tardaron en alzar la voz diversos alcaldes de localidades que llevan sin médico en el consultorio semanas o meses, como ha ocurrido en Boada o Aldeacipreste, municipio este último en el que son ya tres meses los que llevan sin ver al médico por las localidades de dicho municipio (Valbuena y Aldeacipreste).

No obstante, los números de días sin médico son aún peores en algunas localidades de la provincia hermana de Zamora. Y es que, según han denunciado los vecinos de Brandilanes y Lober, estas localidades llevan sin médico desde el año 2019, mientras que en Monumenta de Sayago los vecinos tienen instalado un contador que actualizan a diario con los días que llevan sin médico en el consultorio, y que roza ya los 700 días.

Por otro lado, entre las formaciones que se presentan a las elecciones autonómicas, Mañueco también recibió el ‘tirón de orejas’ de Unión del Pueblo Leonés (UPL), que desempolvó la hemeroteca para dejar en evidencia que la promesa realizada por Mañueco ahora, ya la había hecho en la precampaña de 2019, incumpliendo su palabra.

Pero además, los leonesistas no quisieron ceñirse solamente a los consultorios de atención primaria, y le recordaron a Mañueco que hace unos meses les trasladó el compromiso de dotar de una UVI móvil a Vitigudino y Fermoselle, pero que seguía sin llevar a efecto dicho compromiso, señalándole además los incumplimientos respecto a otras promesas como la Radioterapia en el hospital del Bierzo, o la construcción de los centros de salud del Zurguén, Prosperidad, Villalpando y Villaquilambre, que siguen lejos de convertirse en una realidad.

Y es que la situación de la Sanidad pública no pasa por su mejor momento, especialmente la rural (como ponen en evidencia las protestas habidas en numerosas localidades en los últimos años), con continuos tijeretazos a un servicio tan básico como contar con una mínima cobertura sanitaria, que acaba siendo un factor decisivo para seguir vaciando más nuestras comarcas, concentrándose más la población en las ciudades, en una tendencia ayudada por la diferencia de servicios entre los ámbitos rural y urbano.

Sin embargo, tampoco en nuestra capital provincial se están haciendo las cosas como se debería, con un maltrato crónico al Complejo Hospitalario de Salamanca desde hace años que, más allá del desprecio que supone que aquí llegasen las sábanas viejas que no querían en el hospital de Burgos, han implicado que el hospital de Salamanca sea el que más lista de espera posee de toda la comunidad autónoma.

En este aspecto, la falta de dotación de los recursos humanos necesarios para atender a la demanda de nuestro complejo hospitalario por parte de la Junta de Castilla y León, no sólo está provocando un retraso en las intervenciones quirúrgicas, sino que además está sobrecargando hasta el límite a nuestros sanitarios, que en su deseo de llegar más allá de donde le permiten sus fuerzas, están siendo víctimas directas del maltrato pertrechado desde la administración a nuestra sanidad pública.

Por otro lado, la continua apelación de “si quieres que te traten antes, vete a la privada” que deja entrever la Junta, resulta dolorosa para algunas familias cuyos recursos económicos no le permiten esa opción y la falta de cuidado de nuestra Sanidad pública acaba desembocando en lesiones crónicas en algunos casos, ante la falta de tratamiento en tiempo y forma.

Y entretanto, en Las Arribes seguiremos esperando que los jerifaltes que rigen nuestros destinos desde Valladolid se avengan a dotarnos al menos de una ambulancia de emergencias propiamente dicha a la zona, a pesar de que con el millón y medio de euros que destinan a fomentar el nacionalismo pancastellanista en el chiringuito de la Fundación Villalar-Castilla y León, tenían para comprar varias UVIs móviles. Pero ya se sabe que las prioridades de los gobernantes van a veces por caminos muy distintos a las necesidades del pueblo, pero eso sí, que no falten las promesas en estas fechas de precampaña, no siendo que retiremos el voto a quien nos traicionó previamente.