Queda completada la E-80, una de las carreteras más largas de Europa con más de 5.000 kilómetros
La frontera entre España y Portugal por Fuentes de Oñoro y Vilar Formoso vivió en la tarde del lunes un “momento histórico” -como lo definió la subdelegada del Gobierno en la provincia de Salamanca, Encarnación Pérez- con la apertura al tráfico de los últimos 3,2 kilómetros que restaban de la Autovía A-62, lo que unido a la idéntica operación realizada en la A-25 portuguesa supone que ambos países queden conectados de forma directa por autovía, dejando de ser necesario el tránsito por las mencionadas localidades para pasar de un país a otro.
La apertura de la conexión directa se produjo en el marco de un protocolario acto oficial -en una carpa montada en plena calzada del tramo portugués- al que asistieron autoridades de ambos países, encabezadas por parte española por el director general de Carreteras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Javier Herrero (quién excuso a la ministra, Raquel Sánchez, que estaba en la inauguración del AVE Madrid-Galicia); y por parte lusa, por su secretario de Estado de Infraestructuras, Jorge Moreno Delgado (tras ser baja de última hora el Ministro de Transportes, Pedro Nuno Santos).
Las autoridades incidieron en sus intervenciones en las buenas relaciones entre ambos países, mencionado Jorge Moreno Delgado que ya de salida “somos vecinos, somos hermanos”, pero es que en materia de infraestructuras “la relación es muy intensa” y “estamos haciendo un enorme trabajo conjunto”, sobre todo en carreteras, “constituyendo un desafío de enorme importancia para ambos países”. Con la apertura, “creamos puentes, reafirmamos nuestra condición de países hermanos; somos europeos y estamos orgullosos de hacer un proyecto común; nuestra condición geográfica hace nuestra relación muy especial”, además de estar “condenados a entendernos”.
Por su parte, Javier Herrero subrayó que la apertura de la conexión es “la prueba palpable de la magnífica colaboración de los dos países en todos los campos”, por lo que estaba “más que contento; es un orgullo infinito poder estar en el momento en que el último límite del eje de comunicación queda solventado”. En ese mismo sentido, Encarnación Pérez dijo que la apertura de este último tramo, que es “esperado desde hace muchos años”, “rompe el nudo de la frontera”, incidiendo en que no sólo supone completar por fin la creación de la Autovía A-62 (la conocida como ‘Autovía de Castilla’), sino que implica culminar una de las carreteras más largas de Europa, la E-80, de más de 5.000 kilómetros de longitud.
Esta carretera tiene su punto de arranque en Lisboa, entrando en España por Fuentes de Oñoro, para recorrer la A-62, la autopista AP-1 y la autovía A-1 hasta Irún, donde salta a Francia, atravesando el sur de ese país hasta llegar a Italia, donde el destino final es Pescara. Allí se debe coger un ferry para atravesar el Mar Adriático hacia Dubrovnik, en Croacia, donde se retoma la E-80, que posteriormente continúa por Montenegro, Serbia, Kosovo, de nuevo Serbia, Bulgaria y Turquía, culminando definitivamente en la frontera de este país con Irán. En este punto ya comienza la AH1 asiática, que llega hasta Japón.
En lo que respecta al tramo español inaugurado en la tarde del lunes, de 3,2 kilómetros de longitud, se une a los 1,8 kilómetros que entraron en servicio hace dos años (se ha esperado a que estuviera culminada la A-25 portuguesa para hacer la apertura completa de la A-62, como recordó Encarnación Pérez), conformando todos ellos el tramo denominado ‘Fuentes de Oñoro-frontera portuguesa’, “corto”, como lo definió la subdelegada del Gobierno, pero “clave para la seguridad del transporte”.
Los 5 kilómetros han tenido un coste de ejecución de 25,8 millones de euros (cofinanciados por el Mecanismo ‘Conectar Europa’ de la Unión Europea), contando con ocho estructuras: dos pasos de carretera sobre autovía, un paso de carretera bajo autovía, un viaducto sobre el Arroyo Rivera del Campo, un paso para fauna bajo el tronco de la autovía (y en continuidad con éste, un paso de fauna bajo la vía de servicio), y dos pasos de ganado.
Asimismo, el tramo español de la A-62 cuenta con dos enlaces, denominados de Fuentes de Oñoro (en servicio desde noviembre de 2019), que da acceso a esa localidad (mediante la N-620) y a la estación de servicio; y de la Frontera, que llega a la carretera provincial CV-49 hacia Aldea del Obispo y el Pueblo Nuevo de Fuentes de Oñoro. Este enlace será el que permitirá llegar a los futuros polígonos industriales previstos a ambos lados de la frontera.