Las claves que ya se conocen de la futura Ley de Vivienda
La futura Ley de Vivienda quiere facilitar el alquiler, sobre todo entre los más jóvenes
Medidas dirigidas tanto a pequeños propietarios como a los grandes tenedores para tratar de controlar los precios
Aunque todavía no se conoce todo el contenido de la futura Ley de Vivienda -ni su fecha de aprobación- acordada por los socios del Gobierno de coalición, sí se han avanzado algunas medidas, dirigidas tanto a pequeños propietarios como a los grandes tenedores (con más de diez viviendas alquiladas). En este último caso, con el reto de controlar los precios en las zonas tensionadas. El límite al alquiler en estos casos se basará en el índice de referencia para todos los contratos en las zonas de mercado tensionado.
La futura Ley prevé una bonificación de hasta el 90% de las rentas que obtengan los pequeños propietarios en caso de que bajen el precio del alquiler respecto al contrato anterior. Si alquilan a jóvenes menores de 35 años, la bonificación alcanzaría hasta el 75%.
Habrá un recargo de hasta el 150% en el IBI para las viviendas vacías durante un tiempo prolongado. El recargo en el IBI que se planteará para viviendas vacías sólo se aplicará en los Ayuntamientos que lo pidan.
Del mismo modo, y en lo relativo al control de los precios de alquiler, será las comunidades que lo deseen las que deberán solicitar la declaración de una zona tensionada de mercado, para poder intervenir los precios de los alquileres con los mecanismos disponibles que se definan en la norma. Las limitaciones de los precios sólo van a afectar a las personas jurídicas. ¿Y qué se considera una zona tensionada? Aquella en la que se ha producido un aumento sostenido en el precio de los alquileres en los últimos años, en concreto, cuando el precio del alquiler aumenta cinco puntos por encima del IPC y en las que el gasto medio para afrontar su pago supera el 30% de los ingresos o de la renta mensual.
Un bono social para los jóvenes de entre 18 y 35 años, para ayudarles a su emancipación. Será de 250 euros y se extenderá durante dos años. Podrán acceder los jóvenes con rentas de trabajo o ingresos anuales inferiores a 23.725 euros al año. Aunque en los casos de las familias más vulnerables este 'bono joven' podrá completarse con más ayudas directas al alquiler de hasta el 40% de su valor.
La nueva ley de vivienda también contempla espera destinar un 30% de las promociones a vivienda protegida, para ampliar el parque público de vivienda, mientras que un 15% de esa cifra será para alquiler social.
Por otra parte, la futura Ley de Vivienda también incluirá la imposibilidad de venta de vivienda pública por parte de las administraciones a entidades privadas (como fondos de inversión), para lo cual se establecerá un régimen de protección permanente que excluya su recalificación.