Se han contabilizado 1.260 pernoctaciones a lo largo del fin de semana, durante el cual a algún bar se le agotaron las existencias
La Feria del Caballo que vivía Ciudad Rodrigo de forma previa a la pandemia con el Polígono Industrial de Los Chabarcones como epicentro ha pasado posiblemente a mejor vida, una vez se ha visto cómo ha funcionado la Feria desarrollada durante este último fin de semana en los fosos de la Rúa del Sol y su entorno, según se puso de manifiesto en la tarde del miércoles en una valoración que hicieron junto a esos mismos fosos el Ayuntamiento y varios involucrados directa e indirectamente en el evento.
En palabras del alcalde Marcos Iglesias, "la satisfacción es de todos; hemos readaptado la Feria de este modo y el resultado es positivo", yendo más allá Ángel López Manzano, presidente de la Asociación Charra de El Caballo, quién la definió como "exitazo total y absoluto", considerando la clave el "traerla del Polígono de Los Chabarcones hasta aquí; está ubicación es inmejorable", entendiendo que "va a ayudarle a subir, le va a dar caché, y va a servir también para vender la ciudad; debe ser un aliciente para que la Feria crezca".
Ángel López Manzano fue uno de los que más venía insistiendo (desde antes incluso de la pandemia) que la Feria tuviese como epicentro los fosos y su entorno, según explicó el delegado de Ferias Ganaderas del Ayuntamiento, Ramón Sastre, quién considera que "ha sido bueno mezclar el caballo con la cultura, para que todo el mundo conozca la ciudad", especialmente aquellos que otras veces solo venían a competir y se marchaban sin visitar nada.
En esa misma línea, Marcos Iglesias remarcó que "hemos integrado la Feria en el entorno patrimonial", entendiendo que "la belleza de la ciudad y el caballo generan una combinación única y puede hacer crecer a la Feria", apuntando que el conjunto del público "ha destacado la nobleza y vistosidad de hacerla aquí". Así, los que han venido de fuera "se han llevado una imagen idílica de nuestra ciudad, que es de lo que se trata, con iniciativas de calidad", considerando que la Feria "puede ganar en calidad con la ayuda del sector". Además, la nueva ubicación en el centro ha hecho que se acerque a "más público de todas las edades", según Ramón Sastre.
En números, durante el fin de semana se tienen contabilizadas 1.260 pernoctaciones en Ciudad Rodrigo, "lo que es un gran empujón económico para la ciudad", en palabras de Marcos Iglesias. En ese sentido, José Corchete, del grupo Arcos, quiso resaltar en la tarde del miércoles que ese empujón económico ha sido "muy plural", porque se ha beneficiado la restauración, la hotelería y la noche, apuntando que la 'antigua' Feria del Caballo algunos años prácticamente ni se notaba en los establecimientos que regenta. Este gran impacto ("todo el mundo está contento") se nota por ejemplo en que al menos un bar de la Plaza Mayor agotó sus existencias.
De los eventos con los que ha contado la Feria (que se preparó en el marco del Covid, "lo que ha impedido hacer muchas cosas", como recordó Ramón Sastre), se incidió sobre todo en el Campeonato de España de Equitación de Trabajo. El presidente del Jurado, José Andrés Benito, apuntó que "sino ha sido el mejor concurso de la historia, ha sido uno de los mejores", subrayando Marcos Iglesias que "nos han visto en muchos países" (se emitió en directo por Internet). En esos concursos intervinieron como ayudantes de la Secretaría alumnas del Centro Ecuestre Casasola, apuntando Juan Luis Montero 'Perita' que "han podido acercarse a la competición, y eso hace afición".
Para Juan Luis Montero 'Perita', esta apuesta por la competición es importante, porque trae gente de fuera, pero "no hay que darle la espalda a la participación local", apostando por ejemplo por la creación de más rutas, "para que la gente se monte en sus caballos". De momento, la Ruta Wellington que se ha desarrollado un año más acabó por contar con cerca de 60 participantes, entre los cuales había "personas de toda la comarca e incluso de Portugal", según resaltó Ángel López Manzano.
Precisamente, la 'vía portuguesa' es uno de los caminos para que crezca la Feria. En este sentido, José Corchete espera que "en años venideros no nos olvidemos que tenemos a 27 kilómetros a los mayores aficionados de Europa", por lo que "debemos hacer que se sientan partícipes". En la misma línea, se puso como ejemplo de posible crecimiento de la Feria mirobrigense la que se desarrolla en la localidad portuguesa de Golega. Para José Andrés Benito, "es el sueño, aspirar a llegar ahí", remarcando que Ciudad Rodrigo "es un pueblo que vive por el caballo y el toro, y hay mucho lugar para crecer".
De momento, una de las cuestiones que parece casi segura de cara al futuro es que la Feria se quedará en los fosos y su entorno. Según Marcos Iglesias, "a veces hay que reinventarse, y Ciudad Rodrigo ha gozado de una Feria magnífica, por lo que quizás hay que darle un nuevo aire" respecto a lo que se conocía antes de la pandemia, que este año todavía no se podía hacer por las restricciones. De momento, "hay que sentarse y valorar todo, pero queremos que en años sucesivos pueda ser una referencia y quedarse en este lugar", siendo "la idea" en todo caso que "la Feria crezca".