El eritema multiforme es una reacción de hipersensibilidad alérgica con lesiones cutáneas y que podría ser una reacción adversa
A estas alturas de la vacunación frente a la Covid-19 -con más de 32 millones de personas con la pauta completa en nuestro país- ya sabemos que, como todo medicamento, pueden tener efectos secundarios, la mayoría leves y pasajeros. Según el séptimo Informe de Farmacovigilancia sobre Vacunas de la Covid-19 publicado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), hasta el 11 de julio, se han registrado un total de 32.901 notificaciones de acontecimientos adversos, lo que correspondería a 67 notificaciones por cada 100.000 dosis administradas. El 75% han sido comunicadas por profesionales sanitarios y el 25% por ciudadanos. La mayoría de las notificaciones corresponden a personas de entre 18 y 65 años (88%) y mayoritariamente a mujeres (77%).
El dolor en el brazo, fatiga, fiebre o dolor de cabeza son algunas de las reacciones más comunes tras recibir la vacuna de la Covid-19. Al prospecto de las vacunas de Pfizer y Moderna podrían sumarse en breve nuevos efectos secundarios, una vez concluya el estudio que está llevando a cabo el Comité de Seguridad (PRAC, por sus siglas en inglés) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés).
En concreto, según detalla el organismo regulador europeo en unos documentos de actualización de seguridad de las vacunas, se trata de eritema multiforme, glomerulonefritis y síndrome nefrótico.
¿Qué es el eritema multiforme?
Se trata de una reacción de hipersensibilidad alérgica con lesiones cutáneas redondas características que también puede afectar a las membranas mucosas de las cavidades internas del cuerpo.
La EMA ha registrado "un pequeño número de casos" notificados tras la vacunación con Pfizer y Moderna, por lo que se han solicitado más datos para su evaluación.
Otros efectos secundarios en el punto de mira son la glomerulonefritis (inflamación de los diminutos filtros de los riñones) y el síndrome nefrótico (trastorno renal que hace que los riñones pierdan demasiadas proteínas en la orina).
Según la EMA, los pacientes afectados pueden presentar orina sanguinolenta o espumosa, edema (hinchazón de los párpados, los pies o el abdomen) o fatiga. En este caso también se ha registrado "un pequeño número de casos" notificados tras la vacunación con Pfizer y Moderna, incluidos casos en los que los pacientes experimentaron una recaída de enfermedades renales preexistentes.