Las personas que reciben la vacuna de AstraZeneca como primera dosis y la de Pfizer como segunda muestran una respuesta inmunitaria significativamente mayor que las que reciben la vacuna de AstraZeneca en ambas ocasiones, según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad del Sarre (Alemania).
El trabajo ha tenido como objetivo determinar la fuerza de la respuesta inmunitaria en 216 personas dos semanas después de haber completado su serie de vacunación. Todas ellas fueron vacunados durante los meses de primavera por el médico laboral del Centro Médico de la Universidad del Sarre en Homburg.
Una parte de la cohorte del estudio recibió dos dosis de la vacuna de AstraZeneca o dos dosis de la vacuna de Pfizer, y el resto de recibió una dosis de cada vacuna con un intervalo de nueve a doce semanas, en lo que se conoce como vacunación heteróloga de refuerzo (también denominada vacunación "mixta"). Otros miembros de la cohorte de prueba recibieron dos dosis de la vacuna Moderna o una combinación de las vacunas AstraZeneca y Moderna.
El análisis de los niveles de producción de anticuerpos demostró que una vacunación combinada AstraZeneca/BioNTech o una dosis doble de Pfizer es significativamente más eficaz que una dosis doble de la vacuna AstraZeneca.
Además, el equipo descubrió que el
nivel de anticuerpos en la sangre era unas diez veces mayor en las personas que se sometieron a la combinación AstraZeneca/Pfizer o a la vacunación doble de Pfizer. Cuando examinaron los anticuerpos neutralizantes, descubrieron que la estrategia combinada dio un resultado
ligeramente mejor que el obtenido con la doble dosis de Pfizer.
El equipo de investigación de Sester también examinó dos tipos diferentes de células T, unos glóbulos blancos que desempeñan un papel importante en el sistema inmunitario del organismo. Los linfocitos T auxiliares tienen una serie de funciones, entre ellas la de activar la producción de anticuerpos. El papel de las células T asesinas es destruir las células que se han infectado con el virus. Las células T asesinas son especialmente importantes para prevenir la enfermedad COVID-19 grave y la hospitalización.
Tanto la combinación de vacunas como la vacunación doble de Pfizer fueron sustancialmente más eficaces en la producción de ambos tipos de células T. La producción de células T asesinas fue más pronunciada en los sujetos que habían recibido la vacuna heteróloga, reflejando los resultados de los anticuerpos neutralizantes.
Esto proporciona una prueba bastante sorprendente de que una dosis doble de la vacuna de AstraZeneca no es capaz de movilizar las respuestas inmunitarias del organismo con tanta fuerza como los otros dos regímenes de vacunación. Sin embargo, esto no significa que las personas que han recibido una dosis doble de AstraZeneca tengan un nivel insuficiente de protección contra el virus.
Los ensayos clínicos y el éxito de las campañas de vacunación en otros países demuestran el alto nivel de eficacia de la vacuna AstraZeneca, si bien, según han explicado los investigadores, indica que una segunda dosis de AstraZeneca no es capaz de desencadenar todo el potencial que realmente está presente en esta vacuna.