Los mirobrigenses perdieron por la mínima ante el Valladolid B y empataron a cero ante Unionistas
Un mes y dos días después de lograr el ansiado ascenso a 3ª RFEF, el Ciudad Rodrigo CF volvió en la tarde del miércoles a los terrenos de juego para disputar junto a dos equipos de la nueva 1ª RFEF, Unionistas de Salamanca y Valladolid B, un triangular en el Francisco Mateos a modo de apertura de los compromisos preparatorios del nuevo curso liguero, sobre el que este jueves debería haber novedades ya que se celebra la Asamblea General de la Federación de Castilla y León de Fútbol.
El triangular, a beneficio de la Asociación Mirobrigense de Diabetes, y con un amplísimo número de aficionados de Unionistas en las gradas, se abrió con el duelo entre el Ciudad Rodrigo y el Valladolid B, en el cual se impuso por 0-1 el conjunto pucelano, al que va a entrenar este curso Julio Baptista, quién retornó al Francisco Mateos menos de un año después de visitarlo con el Juvenil del mismo Club para disputar un amistoso previo a la temporada 2020/2021.
El gol del Valladolid llegó en el 12': el Ciudad Rodrigo falló a la hora de despejar en su área el balón, que le cayó a un jugador visitante, Dali, quién resolvió de cerca ante el portero mirobrigense, Alberto. De forma previa al gol, no había habido ocasiones claras pese a tener el encuentro un alto ritmo, pero tras el mismo sí creció el peligro por parte del Valladolid, siendo clave Alberto para que no creciese el marcador (hizo dos paradones en el 16' -a un remate en el área a un balón colgado desde la derecha- y en el 23' -a un disparo desde el pico izquierdo del área-).
La otra gran ocasión del encuentro fue en el 27', con un lanzamiento de falta desde algo más allá del área que impactó en el larguero. Aunque en los minutos siguientes Alberto volvió a estar atinado para salvar tres intentonas más en el área, el partido se fue abriendo según se acercaba el final, teniendo una ocasión el Ciudad Rodrigo, con un fuerte disparo de Alberto García desde fuera del área que se marchó al lado del palo derecho (además los mirobrigenses botaron un par de córners en esos minutos). Por si era necesario a posterior para dilucidar quién era el ganador del triangular, se acabaron tirando penaltys, ganando la tanda 6-5 el Valladolid B (su portero detuvo el lanzamiento de Javi Moríñigo).
En el segundo encuentro de la tarde, más físico que el primero, entre Unionistas de Salamanca y Valladolid B, el marcador tardó apenas un minuto en moverse, con un remate de cabeza de Pitu Doncel a un balón colgado desde la derecha. En los minutos siguientes, Unionistas generó bastantes ocasiones, de la mano de Nespral, Íñigo Muñoz (lo probaron sin suerte desde fuera del área), o Rayco, quién tras robar el balón se plantó ante el portero pero se topó con él.
El Valladolid B no tiró a puerta hasta el 34', pero tuvo premio. Fue en una acción en la cual Chuchi abrió el balón desde la media luna del área a Castri, quién batió al portero de Unionistas según se iba acercando a él. Tras ese tanto, el partido se abrió bastante, viviéndose un toma y daca en los últimos compases, en los cuales el Valladolid B tuvo dos buenas llegadas que desbarató Unionistas (un pase de la muerte y un fuerte disparo desde la frontal), mientras que Unionistas pudo marcar un golazo cuando Rayco lo probó desde el medio del campo al ver adelantado al portero, pero éste logró llegar a rozar el balón, que se estrelló en el larguero.
Los penaltys posteriores se resolvieron rápido, ya que el portero de Unionistas detuvo los dos primeros lanzamientos del Valladolid B, mientras que Unionistas marcó los suyos, por lo que ya no se lanzaron más. A la postre, esos penaltys no fueron necesarios, ya que el último partido de la tarde-noche entre Ciudad Rodrigo y Unionistas acabó 0-0. Este duelo fue el clásico de principios de pretemporada entre dos conjuntos de diferentes categorías, siendo claro dominador Unionistas, pero sin llegar a tener ocasiones verdaderamente claras.
En ello tuvo bastante que ver una de las señas de identidad del Ciudad Rodrigo, la fortaleza atrás, estando atinados tanto Pepo como la defensa para desbaratar las intentonas peligrosas de Unionistas, que fueron especialmente balones colgados que no llegaron a buen puerto. Por parte mirobrigense, apenas hubo un par de intentonas desde fuera del área que se perdieron, hasta que en los minutos finales se abrió un poco el partido, intentando el Ciudad Rodrigo estirarse y presionar, pero no llegó a rematar con claridad, por lo que el marcador no llegó a moverse.
Por lo tanto, con una victoria y un empate, el triunfo en el triangular se lo llevó el Valladolid B, que estuvo siguiendo en la banda los compases finales del partido entre el Ciudad Rodrigo y Unionistas para irse del Francisco Mateos rumbo a Valladolid conociendo el desenlace. Por su parte, los jugadores de Unionistas realizaron con su amplio número de aficionados su habitual rito de despedida, que prácticamente no pudieron realizar el curso pasado debido a las restricciones de entrada de público a su campo por las obras que se están realizando en el mismo.