Carnero considera imprescindible un aumento de la regulación de la cuenca del Duero y preocupante la implantación de caudales aguas abajo de los embalses
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, y la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés, han debatido sobre las actuaciones recogidas en el Plan Hidrológico actual, las regulaciones pendientes urgentes y el Esquema provisional de Temas Importantes (EpTI), con el compromiso de seguir acercando posturas mediante sucesivas reuniones técnicas en las próximas semanas.
En este encuentro, Carnero ha dejado claro que considera imprescindible llevar a cabo el aumento de la regulación de la cuenca del Duero para garantizar la sostenibilidad futura del regadío en la Comunidad y acometer el citado reto demográfico. Por ello, se ha demandado, una vez más, la inclusión de nuevas regulaciones en la planificación hidrológica para su desarrollo, muchas de las cuales ya están incluidas en el plan hidrológico actual, por lo que se vuelven a demandar por su importancia. Estamos hablando de la zona del Órbigo (balsas de La Rial y Los Morales), Carrión (Las Cuezas), Cega (Lastras de Cuéllar), balsas laterales de la zona de Tordesillas y recrecimiento de la presa de Santa Teresa.
Asimismo, respecto a los caudales ecológicos, el consejero considera preocupante la implantación de caudales aguas abajo de los embalses, ya que esto puede afectar a las garantías de agua para los regadíos. En este sentido, Carnero ha propuesto "no aplicar los caudales máximos en los embalses del Porma, Cervera, Requejada, Aguilar, Cuerda del Pozo, Santa Teresa y Úzquiza, dado que los regadíos son elementos claves para la vertebración del territorio y su desarrollo contribuye a mantener la producción de alimentos y el desarrollo económico y social de las zonas en las que se ubican".
Carnero también ha dejado claro que las inversiones de regadío deben considerarse prioritarias en la Comunidad, por tratarse de un motor generador de empleo, de industria agraria y de sostenibilidad social, económica y medio ambiental que inciden directamente en el acceso al empleo de jóvenes y mujeres en las zonas rurales. En ese sentido, desde la Junta, el incremento de las tarifas y cánones o impuestos medioambientales se considera muy perjudicial para el sector.
Igualmente, desde la Consejería se considera poco acertado la decisión de reducir la actividad agrícola y ganadera en determinadas zonas de la Región como alternativa fundamental para el control de la contaminación difusa. En este sentido, y así lo ha dejado claro el consejero, "ya está en tramitación un Real Decreto que va a contribuir al control de la aportación de fertilizantes". Así mismo ha añadido que "la Administración Regional apuesta decididamente por gestionar con eficiencia la actividad agraria en el medio rural, haciendo compatible la misma con la reducción de la contaminación difusa".