Los ayuntamientos de la comarca han comenzado a aprobar en sus respectivos plenos un manifiesto de apoyo al complejo termal y un llamamiento a las administraciones públicas
El Montepío de la Minería busca soluciones a contrarreloj para tratar de salvar al Balneario de Ledesma de la difícil situación por la que atraviesa -en concurso de acreedores- como consecuencia de los efectos de la pandemia de la Covid-19. Durante 2020 el Balneario solo ha podido abrir sus puertas 76 días, lo que ha generado un desplome de las visitas (la media anual era de unos 16.000 clientes al año) y unas pérdidas de más de un millón de euros. Tras el parón por el confinamiento, el complejo termal y hotelero reanudaba la temporada en julio, pero solo dos meses después se veía obligado a adelantar el cierre de temporada. Actualmente, y en principio hasta el 31 de enero, un centenar de trabajadores se encuentran en ERTE (expediente de regulación de empleo temporal).
Para poder reabrir las instalaciones y mantenerse hasta verano necesitan un millón de euros, apoyo financiero que hasta el momento le han negado los bancos. El Montepío de la Minería ha llamado durante estos meses a todas las puertas para recabar ayudas. Tal y como informaba este fin de semana el diario asturiano 'El Comercio', también ha mantenido reuniones con el Principado, aunque por ahora no hay nada. Otro problema añadido es la incógnita de cuándo se podrán retomar los programas de termalismo del Imserso, cancelados desde el pasado mes de marzo, y que suponían hasta el 60% del negocio del Balneario de Ledesma. El Imserso no ha puesto fecha. Las previsiones más optimistas apuntaban a primavera-verano de este año, pero todo queda a expensas de la evolución de la pandemia de la Covid-19.
Los apoyos que sí ha recabado hasta ahora son los de más de una veintena de ayuntamientos de la comarca de Ledesma, una zona para la que supondría un gran impacto económico el cierre del balnenario, ya que de entrada supondría la pérdida de un centenar de puestos de trabajo. Una iniciativa que se espera que en las próximas semanas sea secundada por algunos ayuntamientos asturianos.
Los ayuntamientos de la comarca han comenzado a aprobar en sus respectivos plenos un manifiesto de apoyo al Balneario de Ledesma y un llamamiento a las administraciones públicas para salvar "un proyecto emblemático para Salamanca, por lo que supone no solo como historia sino por su aportación a la oferta turística de la región y la Comunidad ?es uno de los Balnearios de corte popular con mayor capacidad del país, con 634 plazas". Y, lo más importante, "uno de los motores económicos principales de la Comarca de Ledesma, con más de 100 empleos directos, y numerosos incontables, por esa cadena de valor que representa el suministro y atención que una instalación de estas características requiere".