El invierno de 1962 fue especialmente duro en Salamanca, pues las múltiples nevadas dejaron la ciudad cubierta con un manto blanco
Cierto es que alguna nevadita cae de vez en cuando, pero el cambio climático hace que cada vez sean más distantes y no podamos disfrutar en Salamanca de ellas como antes.
Lejos quedan aquellas pistas para patinar que se formaban sobre las calles con cuesta que provocaban no pocas culadas, al igual que en muchas aceras con superficies heladas y que no eran advertidas por los distraídos paseantes, problema que ahora no se da, pues los servicios municipales lo solucionan rápidamente echando sal, pero antiguamente este servicio era más reducido y solo podían atender a ciertos lugares de la ciudad.
En Salamanca el invierno de 1962 fue especialmente duro pues las múltiples nevadas de aquel año dejaron la ciudad cubierta con un manto blanco de nieve.
La nieve en aquella época, provocaba gran alegría juvenil y servía para hacer batallas con bolas de nieve (chicos contra chicas a la salida de los colegios) y algún muñeco de nieve que se encontraba por las calles.
Fotografías antiguas de la plaza de Colón nevada.
Autor: Luis González de la Huebra.
PRIMERA:
Con las Catedrales al fondo y la estatua de Colón.
SEGUNDA
La plaza, con la torre del Clavero al fondo.