De nuevo tenemos una ley educativa: Ley Orgánica de Modificación de la LOE (LOMLOE), la octava desde 1980, y de nuevo una ley que surge sin una consulta previa y adecuada al profesorado y sus representantes.
Es una ley superficial. Se centra en lo curricular y sobre todo en los procesos administrativos internos. Al menos elimina la LOMCE, pero no resuelve los problemas reales que había con la LOE, por mucho que ladren algunos y algunas reivindicando sus "derechas", como bien queda reflejado en el comunicado de la Federación de Enseñanza de CGT en torno a la sesión de aprobación en el Congreso de la nueva Ley de Educación "Libertad, con ira".
Desde CGT queremos incidir en los aspectos en que la misma debería mejorar:
Para CGT es necesario el compromiso de llegar a medio plazo al 7% del PIB que permitiría disponer de los medios reales para ello, no un 5% antes del 2025.
CGT defiende una escuela pública, inclusiva, no segregacionista, gratuita, laica y no adoctrinadora, donde la diversidad sea un valor. Además, desde CGT nos posicionamos contra cualquier tipo de concierto educativo, quien quiera educación privada que se la pague. Por tanto pedimos la supresión del apartado 7 del artículo 116.
CGT exige que se elimine de una vez la Religión del currículo, ya que esto afecta directamente a nuestros proyectos educativos, a los programas, a los libros de texto, a las coordinaciones de convivencia que en muchas ocasiones asume este profesorado, que se ve beneficiado de este sistema tramposo de acceso, recibiendo incluso un trato privilegiado en las oposiciones de muchas provincias.
CGT propone una mayor presencia de las Humanidades y las Enseñanzas artísticas en Primaria y Secundaria pues con esta modificación curricular dejan al alumnado sin algunas de las materias que le ayudan, unas a plantearse (y responder) preguntas o problemas esenciales para el desarrollo del ser humano, pues son asignaturas que fomentan la reflexión, la argumentación y la crítica, y las otras a saber observar, a reconocer su entorno y a ser sensible a la experiencia visual y estética, a expresar emociones o sentimientos, a ser creativos...
- El acceso a la Función Pública Docente sigue igual, es decir, desfasado. Es un modelo en el que prima lo memorístico, no el verdadero conocimiento del opositor/a. Al mismo tiempo, ha de solucionarse la problemática de 170.000 interinas, un tercio del profesorado no universitario.
CGT aboga por el cambio del modelo de acceso a la Función Pública Docente y por un acceso diferente, para acabar con el abuso de la interinidad y dar estabilidad en el empleo al excesivo número de personal interino.
- Para el acceso al cuerpo de Inspectores, en la Disposición adicional duodécima, punto 4. b), donde antes se hablaba de una "prueba" de conocimientos pedagógicos y normativos, se habla ahora de una "valoración"; este pequeño detalle va a permitir a las Comunidades autónomas interpretar los términos de esa "valoración" según la conveniencia gubernamental del momento.
CGT para así blindar a la Inspección Educativa frente a cualquier presión privada o gubernamental.
En lo positivo, podemos destacar:
Será la enésima ley educativa de nuestro país, muy alejada del acuerdo básico o pacto de estado, que hubiera permitido sentar las bases de la reforma profunda y global que necesita la educación en este país.
Docentes Salamanca CGT