El Obispo emérito de Ciudad Rodrigo participó en las últimas horas en una marcha 'por la familia'
Al igual que la Diócesis de Ciudad Rodrigo sigue sin Obispo titular, también continúa sin destino fijo el que fuera su último prelado hasta la fecha, Raúl Berzosa Martínez, quién presentó su renuncia al gobierno Civitatense hace ya casi dos años, en enero de 2019, tras haber estado desde junio de 2018 en un retiro espiritual especial concedido por el Papa Francisco en un monasterio benedictino francés.
Las últimas noticias que se tenían de Raúl Berzosa databan de septiembre de 2019, cuando, tras haber pasado el primer semestre de ese año colaborando en una Parroquia de Bogotá (Colombia), fue destinado a Roma, quedando "al servicio de la Santa Sede", sin que se especificase cuál iba a ser su cometido. Durante este algo más de un año se ha tenido conocimiento de su presencia en Roma al haber presidido varias eucaristías. Ahora, Berzosa tiene un nuevo destino temporal: la República Dominicana, donde se ha incorporado a su Arquidiócesis de Santo Domingo.
Berzosa -que sigue siendo Obispo emérito de Ciudad Rodrigo- llegó a la República Dominicana durante el mes de octubre, siendo presentado a la comunidad de fieles de la Arquidiócesis de Santo Domingo en una misa celebrada a finales de ese mes. En la misma, el Arzobispo Metropolitano, Francisco Ozoria Acosta, le dio la bienvenida explicando a los fieles que se trataba de un español que llegaba en estos momentos desde Roma "para una experiencia pastoral, misionera, aquí en esta Arquidiócesis", y que se va a quedar "por un buen tiempo".
En estas primeras semanas en República Dominicana, el que fuera Obispo de Ciudad Rodrigo entre 2011 y 2019 está participando en distintos actos tanto propiamente litúrgicos como de otra índole. En este sentido, durante este fin de semana participó en Santo Domingo en una caminata denominada Un paso por mi familia, contra el aborto, la violencia intrafamiliar, y el matrimonio antes de cumplir los 18 años.